El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Temístocles Montás, aseguró que “lo que se tenía que lograr durante el 2013 en los distintos ejes de la Estrategia Nacional de Desarrollo (END), 2030, solo se avanzó en alrededor de un 47%”, y señaló que aunque el país se destaca dentro de las naciones de América Latina, sin duda alguna se requiere de “mayor impulso en lo relacionado a una economía territorial y sectorialmente integrada, innovadora, diversificada, plural, orientada a la calidad y ambientalmente sostenible, que crea y desconcentra la riqueza, genera crecimiento alto y sostenido con equidad y empleo digno, y que aprovecha y potencia las oportunidades del mercado local y se inserta de forma competitiva en la economía global”.
Los deseos y propósitos de que en República Dominicana desaparezcan los hambrientos, desnutridos y sea un verdadero Estado de derecho “donde todos los ciudadanos tengan acceso a servicios de calidad”, sigue siendo una estrategia que, aunque Montás se muestre optimista en su alcance, precisa un desarrollo sostenible donde la desigualdad social se reduzca y deje de ser ese país donde el 20% más rico recibe 14 veces más ingresos que el 20% más pobre, tal y como precisó el ministro.
Temístocles prevé que “si en los próximos 20 años no logramos producir un cambio en esa situación, será muy difícil hablar de inclusión social. Nosotros debemos apostar a más educación, más salud y seguridad social, pero de calidad”.
De todos modos, más allá de su optimismo, el análisis es rotundo y objetivo: “sin esos cambios República Dominicana seguirá siendo una sociedad de excluidos, como ocurre actualmente”.
Una sociedad de excluidos
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Story
Page