De mi Bitácora: Educación

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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Mi maestro inolvidable Don Augusto Peigñant Cestero y la instrucción Moral y Cívica.
 
En el año 1938 estoy en el cuarto curso de la enseñanza elemental graduada. La materia que más me gusta es la instrucción de Moral y Cívica. El maestro Don Augusto Peigñant Cestero explica y dicta los temas. Don Augusto es más que maestro, lo queremos como un padre amoroso, exigente, vigilante, nos corrige explicando la razón de actuar como nos indicaba.
 
El primer día de clase explica qué era la Educación Cívica. Después pregunta para estar seguro que entendimos. Dice bien. Copien: Educación Cívica: Proceso de formación de los individuos de una sociedad, en orden a que cumplan en mejor forma con sus deberes como ciudadanos, y a la vez que estén mejor preparados para el ejercicio de sus derechos civiles y políticos. Por medio de esta educación se introduce en la vida ciudadana a los nuevos miembros de la sociedad y se ayuda a que se preparen mejor los mayores, la formación cívica debe realizarse en la temprana edad.
 
La ordenanza municipal: Es una disposición adoptada por su autoridad local, sobre todo el municipio, para que los ciudadanos la cumplan.
El maestro mostró una ordenanza que establece la obligación de que los solares deben estar limpios.
 
Nos exigía que mostráramos a nuestro padre la clase que él dictaba. El padre debía firmar cada hoja de la libreta. El maestro verificaba la libreta con la firma del padre.
 
Los viernes en la tarde nos dividía en dos grupos para el careo. Los alumnos nos hacíamos preguntas de todo lo enseñado durante la semana. Él decidía y ponía la nota: Muy buena, buena, regular y mala.
 
Antes de comenzar la clase el maestro verificaba la asistencia, leía el nombre del alumno y éste se ponía de pie. Señor maestro presente. El ausente era una visita a la casa con el formulario amarillo firmado por el señor director. Lo llevaba el policía escolar. El padre o madre escribía en el formulario el porqué de la ausencia y lo firmaba.
 
Los maestros eran educados. Por eso, sabían educar en combinación con los padres de familias.
 
Nuestros invitados de hoy. Aristóteles: “La diferencia entre los educados y los ineducados. En tanto como los vivos de los muertos”. “Los educados eran más dignos que los padres que solo engendran a sus hijos. Solo le dan el vivir y los otros el vivir bien”.
 
Epícteto: El maestro ser útil. Los alumnos aprender a ser hombres.
 
El autor es vicealmirante retirado de la Armada Dominicana.