La virtual quiebra de la empresa Cap Cana causaría un hoyo financiero estimado en más de RD$5,000 millones al Banco de Reservas de la República Dominicana, recursos que la entidad bancaria alegadamente concedió en calidad de préstamo al complejo turístico que opera en Higüey.
DominicanosHoy.com supo que el Banco de Reservas abrió hace aproximadamente año y medio una ventanilla de préstamos hipotecarios especiales al complejo turístico Cap Cana, iniciando así un segundo negocio.
Con esas facilidades, cualquier persona interesada en una casa en Cap Cana, adelantaba como inicial el 3%, 5%, 8% o 10 por ciento, y le prestaban el dinero, y que era pagado completo al complejo turístico.
Informes sostienen que la corporación, a todas luces quebrada, a la fecha ha cancelado 1,200 empleados, y no ha podido pagarle ni siquiera a los acreedores más pequeños, quienes tendrían nueve meses reclamando a la firma que honre sus compromisos.
Dentro de esos acreedores estarían vendedores del gasoil para las plantas, comisiones a corredores de terrenos, casas y de proyectos.
Otro “golpe financiero” sufrido por el Banco de Reservas sería la cantidad de recursos todavía sin calcular, desembolsado por el gobierno a través de la entidad bancaria, para financiar la campaña electoral del presidente Leonel Fernández, dinero que no ha regresado a las bóvedas del banco.
“Todas ese desembolso afecta al Banco de Reservas. El presidente Leonel Fernández y el administrador de la entidad bancaria, Daniel Toribio, deben reconocer que se trata de una situación crítica, real, y desligada de la politiquería”, se explicó.
Se advirtió que la situación por la que atraviesa el Banco de Reserva atenta contra el sistema financiero nacional, que podría terminar como el Baninter. “Se trata de un problema de manejo local, lejos de la crisis internacional”, se afirmó.
Agrega la fuente que el Banco Lehman Brothers, antes de quebrar, tenía en proyecto el desembolso de un préstamo por 150 millones de dólares a Cap Cana, y que finalmente le fue negado.
También el Banco UBS le había negado otro préstamo por 100 millones de dólares al complejo turístico, porque hace 12 meses la empresa era considerada de alto riesgo.
“El presidente Fernández, ni la Superintendencia de Bancos, ni el presidente de Cap Cana, le pueden atribuir los inconvenientes de esa compañía a la crisis internacionales”, explicó un conocedor de la problemática.
Se dijo que la virtual quiebra de Cap Cana también pone en riesgo el turismo dominicano, ya que alegadamente el complejo turístico hasta ha comenzado un litigio con el multimillonario estadounidense Donald Trump.
El derrumbe de Cap Cana se une a una grave situación relacionada con las ventas de las acciones de los aereopuertos del país, ya que el monto pequeño de adelanto entregado por los arrendatarios mexicanos ha tomado rumbo desconocido.
Se entiende que esos recursos pudieron ser invertidos en el propio proyecto, pagar parte de las deudas con el Banco de Reservas y otras entidades financieras.
Se informó que la negociación de ventas y acciones a los mexicanos está siendo investigada profundamente por el Congreso dominicano, ya que se habrían violado una serie de disposiciones en el contrato.
