La Secretaría de Estado de Cultura presentó la obra “El Palacio de Bellas Artes”, de la autoría de Myrna Guerrero, durante un encuentro enmarcado en el Programa de la Temporada Inaugural del Nuevo Palacio de Bellas Artes.
La autora de la obra, Myrna Guerrero explicó que “este proyecto editorial surge con el propósito de rescatar la historia del edificio, con las actividades y protagonistas que le han acompañado durante todos estos años”.
Agregó que “la consulta a documentos del Archivo General de la Nación, publicaciones de la época de la inauguración del edificio, el acceso a archivos de las compañías nacionales así como a archivos particulares de artistas, familiares y animadores culturales, junto a entrevistas con personas relacionadas a la concepción, construcción y vida de este edificio nos permitieron elaborar una historia afianzada en momentos significativos del edificio y del arte nacional”.
Puntualizó que la actual remodelación y reconstrucción, en un contexto cultural más plural y menos elitista, es propicia para que el histórico edificio asuma una función social más amplia y ahora con una mejor valoración del quehacer cultural y mayor cercanía a todos los públicos.
El libro recoge la historia del Palacio de Bellas Artes desde el 1956 hasta 2008 en unas 300 páginas satinadas, el cual se imprimió en Amigo del Hogar, mientras que el diseño estuvo a cargo de Ninón León de Saleme; la corrección e índice onomástico fue responsabilidad de Milagros Germán R.; la portada de Max Pou y fotografías de Mariano Hernández, Antonio Hernández Troncoso, archivos particulares, así como de los periódicos La Nación y El Caribe.
Entre los temas que abarca la obra se encuentran: “Una política cultural ejemplar. Rafael Díaz Niese y la Dirección General de Bellas Artes”; “El Palacio de Bellas Artes Un edificio para crear y disfrutar las artes”; “Inauguración”; “ La Galería Nacional de Bellas Artes. Una colección nacional” y “La remodelación del Palacio de Bellas Artes 2005- 2008”.
La construcción del Palacio de Bellas Artes inició en el 1953 y concluyó en el 1956 a cargo de los arquitectos Francisco Manuel Batista y Bienvenido Martínez. En tanto su remodelación fue establecida por una disposición del Presidente de la República , Doctor Leonel Fernández Reyna, debido al deplorable estado en que se encontraba y los trabajos fueron ejecutados por la Compañía Arquiconstrusa , S.A., encabezado por el ingeniero Francisco Pimentel y auspiciada por la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado.
Como parte de sus planes de expansión al mercado estadounidense y en el marco de la celebración de su 60 aniversario, Industrias Aguayo recibió la visita de un importante grupo de invitados especialistas en el mercado de los mosaicos de Estados Unidos, con la finalidad de conocer las instalaciones de la empresa.