A la crisis de agua potable se suman los apagones, que según sus habitantes se extienden hasta por 18 y 20 horas consecutivas. Esta misma situación enfrenta los residentes de los municipios de Gaspar Hernández, Río San Juan y Cabrera en las provincias Espaillat y María Trinidad Sánchez.
Mientras que los municipios de Salcedo, Tenares y Villa Tapia en la provincia Hermanas Mirabal, también hay serios problemas con el suministro de agua y de energía, denunció el presidente del Consejo de Desarrollo, José Aníbal García.
García reveló que la crisis de agua y de electricidad no sólo se siente en los pueblos y comunidades de la provincia Hermanas Mirabal, sino que se manifiestan en otras poblaciones del nordeste, como San Francisco de Macorís, Hostos, Pimentel, Castillo, Villa Rivas, las Guaranas y comunidades del bajo Yuna.
