Mayweather comienza a barajar nombres de rivales para septiembre

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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Las Vegas.- Floyd Mayweather Jr. venció la noche del sábado a Robert Guerrero sin siquiera despeinarse.
 
Y festejará su contundente victoria el fin de semana de la Independencia Mexicana en su casa, Las Vegas.
 
Mayweather aseguró que peleará el 14 de septiembre, aunque aún desconoce el rival en turno.
 
Sin embargo, aceptó que al menos meditará y conversará sobre un posible pleito con el campeón mexicano Superwelter del Consejo Mundial de Boxeo, Saúl «El Canelo» Álvarez.
 
«El ‘Canelo’ es un gran boxeador, de los mejores del mundo en este momento», dijo Mayweather. «Pero cuando lo ví pelear contra Trout, pensé que el resultado era mucho más cercano de lo que ellos (jueces) anotaron».
 
Álvarez derrotó por decisión unánime, 115-112, 116-111 y 118-109, a Trout el pasado 20 de abril frente a 39 mil 287 aficionados en el Alamodome de San Antonio.
 
«Estoy en el pináculo, de nuevo mostré que soy el mejor en este deporte y tengo que planear cuál es el siguiente paso», agregó. «Voy a pelear en septiembre, aquí en Las Vegas. Hay que revisar quién ha hecho lo suficiente y tiene boxeo para dar un buen espectáculo conmigo».
 
Se suponía que Guerrero tenía las credenciales, sobre todo después de vencer a Oberto. Toda la semana negó tener presión, pero la realidad es que arriba del cuadrilatero lució la mayor parte del tiempo con pánico escénico.
 
Nunca encontró la manera de conectar a Mayweather, cuya única molestia, que señaló al final de la pelea, fue en la mano derecha con la que se cansó de conectar a Guerrero.
 
«Lo di todo en el cuadrilátero, pero Floyd Mayweather demostró que es el mejor en todos los aspectos», dijo Guerrero. «Es muy difícil alcanzarlo con la movilidad que mantiene y también tiene muchísima rapidez para colocar los golpes»
 
«El Money Maker» argumentó que esas molestias en la mano que comenzó a sentir a media pelea impidieron que finiquitara con nocaut a Guerrero. Pero cree que no le impedirán tener un combate este septiembre, que significara el periodo de tiempo más corto entre peleas para Mayweather en los últimos once años.
 
Antes de enfrentar a Guerrero, Mayweather había peleado contra Miguel Cotto el 5 de mayo del 2012.
 
«Me voy a tomar unas merecidas vacaciones y después comenzaremos a hablar de la pelea en septiembre», reiteró. «Muchos dijeron que mis piernas ya no eran las mismas y que mis facultades venían a la baja. Ya vieron que no es así».
 
Mayweather señaló el entrenamiento bajo la tutela de su padre como el principal motivo de mejoría, en especial en su defensa, aunque su tío Roger Mayweather también participó en la preparación.
 
Según las estadísticas oficiales del combate, Guerrero ni siquiera atinó 40 por ciento de los disparos que envió.
 
«Va a ser un problema para cualquiera que decida enfrentar mi hijo», dijo Floyd Mayweather Sr. «Floyd está de regreso; el verdadero Floyd está aquí y a sus 36 años mejor que nunca».