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Imprudencias tránsito: llevan luto hogares RD

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El reporte del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), el cual indica que de 29 personas que murieron durante el feriado de Semana Santa de este año, 27 fueron por accidentes de tránsito, equivalente al 93% de los casos confirma la debilidad del Estado dominicano para contrarrestar ese mal social.
 
Las estadísticas señalan que las muertes se produjeron en 289 colisiones, donde se involucraron 188 motocicletas; 100 vehículos livianos, 1 vehículo pesado y 1 autobús. De estas, 131 ocurrieron en autopistas y carreteras y 158 en cascos urbanos.
 
Esos números confirman los datos dados a conocer en el documento de la Organización Mundial de la Salud (OMS), titulado «Informe sobre la situación mundial de la seguridad vial 2013».
 
En el estudio, República Dominicana figura como el segundo país de los 182 pertenecientes a las Naciones Unidas con más víctimas del tránsito por cada 100 mil habitantes, con una tasa de 41.7 fallecimientos, solamente antecedida por la isla Niue -en el Pacífico- que tiene 68.3. Indica que en el 50.8% de estos, las motocicletas se hallan en los primeros lugares como causas.
 
Señala que estas situaciones se deben a falta de conciencia, imprudencia de muchos conductores y la ausencia de educación vial.
 
Comparación con otros países
 
Para quienes se resisten a creer en las anteriores estadísticas aquí van otros datos: Durante el período de la Semana Mayor, en todos los países de la región el número de decesos por imprudencias en las carreteras, durante el asueto de la Semana Santa, fue menor que en República Dominicana.
 
Por ejemplo, en Honduras, de 40 perecidos, sólo 19 resultaron por accidentes de tránsito; en Guatemala, de 35 víctimas, hubo 9 por esa causa; en El Salvador, de 30, 19; Costa Rica, de 30, 10; Nicaragua, de 29, también 10.
 
Los organismos de socorro dominicanos acentúan el hecho de que con el despliegue del “Plan Operativo Obra Santa, Semana Santa 2013”, en el cual participaron más de 33 mil personas, integradas en más de treinta instituciones, se logró disminuir a 13 el número de víctimas mortales, en relación con el año anterior.
 
Este Plan estuvo estructurado para atender 4 variables fundamentales: Intoxicación alcohólica, por alimentos, accidentes de tránsito y asfixia por inmersión; además, el Plan estuvo dividido en tres fases: una primera de información y divulgación pública, tendente a sensibilizar la población acerca de las medidas preventivas para salvaguardar vidas. En la segunda, se puso en ejecución el operativo, iniciando con el despliegue del personal y las unidades de las instituciones, desde el jueves 28 de Marzo a las 2:00, PM y concluyeron el domingo 31, a las 8:00 de la noche.
 
Este operativo contó con brigadistas, médicos, paramédicos, militares, policías, especialistas en búsqueda y rescate, entre otros.
 
Igualmente, hubo 2,512 puestos de socorro, ubicados en puntos críticos en playas, balnearios, carreteras, autopistas y avenidas del país. Se distribuyeron 123 ambulancias, 3 helicópteros, ubicados en puntos estratégicos, 20 puestos de grúas, 8 puestos con carros- talleres previamente establecidos en las autopistas y las carreteras, además de la instalación de 3 hospitales y 12 consultorios móviles, junto a 9 centros de mandos regionales.
 
De acuerdo con los datos del COE, durante el Operativo, la AMET retuvo 352 vehículos pesados por transitar sin el permiso correspondiente; 286 vehículos livianos, 69 camionetas detenidas por exceso de carga y sin documentos y 4, 886 motoristas por transitar sin el casco protector.
 
Pese a todas las medidas asumidas por las autoridades, a las cuales hay que reconocer su entrega y disciplina desplegada durante todas las actividades de la Semana Mayor, muchos hogares dominicanos sufrieron la pérdida de seres queridos, principalmente por las imprudencias y la mala conducción de sus vehículos; sobre todo, por la manera en que los motoristas protagonizan actos de irreflexión y ligereza que les ha llevado a colocarse en el primer índice de mortalidad en las vías.
 
El «Informe sobre la situación mundial de la seguridad vial 2013”, que describe a la nación dominicana entre los más afectados por dicho flagelo, se confirma tras estos días que debieron servir de reflexión y unión familiar, no de dolor y pérdidas humanas.

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