En la actualidad, nueve de las 22 Entidades Fiscalizadores Superiores (EFS), integrantes de la Organización Latinoamericana y del Caribe de Entidades Fiscalizadoras Superiores (Olacefs) son dirigidas por mujeres, “ocupando puestos de segundo y tercer nivel prácticamente en todas ellas”.
La presidenta de la Cámara de Cuentas de la República Dominicana, Licelott Marte de Barrios, quien funge, además, como coordinadora de la delegación de seguimiento de la Resolución de Género y Transparencia en las Olacefs, analizó junto a la ya experimentada en el tema, sobre todo por el puesto que ocupó como Directora Ejecutiva de ONU-Mujeres, Michelle Bachelet, la incorporación de las féminas en puestos directivos de las EFS y con un enfoque común abordaron el establecimiento de los lineamientos de trabajo de Género, Transparencia y Fiscalización contenidos en la Declaración de Santo Domingo sobre la materia.
Todo lo anterior es más que un buen augurio, porque se formulan estrategias para unir esfuerzos en áreas como la capacitación y apoyo técnico, que deben cambiar realidades que reflejan cómo en América Latina y el Caribe poco más de 104 millones de niñas experimentan rezagos en sus oportunidades de desarrollo futuro sólo por ser jóvenes y por ser mujeres, tal y como consignan informes al respecto, los cuales amplían que el 70% de todas las personas que viven en extrema pobreza en el mundo son mujeres y la violencia, sobre todo sexual, es uno los problemas más serios que deben enfrentar menores y adolescentes: víctimas del 50% de las agresiones de este tipo que se cometen en el orbe.
Si particularizamos, en República Dominicana, de la cifra total de abuso sexual en menores, el 92% de los casos fueron contra niñas y adolescentes. El embarazo es otro de los problemas que se enfrenta: el 21% de las muchachas entre 15 y 19 años ha estado alguna vez embarazada y esa es la razón principal por la que desertan de las escuelas las niñas de entre 14 y 17 años.
O sea, que contra todo esto habrá que luchar fuerte, hasta lograr vencer esas tres barreras que impiden el desarrollo de las menores: violencia de género, los embarazos no deseados y el acceso desigual a las oportunidades. Marte de Barrios y Bachelet andan por estas sendas impostergables…
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