Fue cerrada por tiempo indefinido la estación de gasolina ECO, ubicada en la avenida Rómulo Betancourt, sector Bella Vista de la capital, en cumplimiento de una sentencia de un tribunal que determinó su ilegalidad, al ser construida sin aparentemente no contar con el permiso del Ministerio de Medio Ambiente.
Jorge Suriel, administrador de la estación, calificó la media como un abuso de poder del procurador general de la República Francisco Domínguez Brito, tras aclarar que la sentencia lo que dice es que se paralicen los trabajos de construcción de la bomba, la cual llevaba seis meses operando.
Aseguró que cuenta con su permiso del Ministerio de Medio Ambiente, por lo que consideró se está ante la violación a la Constitución de la República y al estado de derecho y dijo que la disposición pone en riesgo una inversión millonaria.
La clausura la ejecutó un alguacil, quien se hizo acompañar de un contingente de agentes de la Policía Nacional.