La Paz (EFE).- La ex rehén de las FARC, Íngrid Betancourt, justificó hoy como "necesaria" la acción militar contra la guerrilla, que a su juicio está "completamente de espaldas" a Colombia y se ha convertido en "un cartel de la droga" que favorece a sus líderes.
Betancourt expresó sus opiniones tras reunirse con el presidente de Bolivia, Evo Morales, en La Paz, en el marco de la gira por Suramérica que realiza con el objetivo de pedir apoyo para lograr la liberación de otros rehenes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Después del encuentro, Morales viajó hacia la zona del Chapare donde dijo que, luego de oír a Betancourt, se sentía más comprometido para gestionar con presidentes y movimientos sociales el fin de los enfrentamientos armados en Latinoamérica.
Durante la rueda de prensa que ofreció al término de su visita a Morales, Betancourt justificó la necesidad de la acción militar contra las FARC porque funcionan como una organización castrense y no como un grupo de "bandoleros".
"La opinión que yo tengo es fruto de lo que viví en cautiverio durante esos casi siete años. Yo pienso que la opción militar, la presión militar sobre las FARC es necesaria", dijo Betancourt.
Esa fue la respuesta que dio al ser consultada sobre qué piensa de la opinión de Morales, expresada esta semana, de que la "opción militar" o "represiva" no era una solución al conflicto colombiano, ya que antes deben resolverse los problemas sociales del país.
"Las FARC hoy en día son una organización obviamente militar. No son una organización de bandoleros. Es una organización (…) que tiene una doctrina que es una opción comunista de los años 50".
"Pero, es una guerrilla que dejó de ser lo esencial (…), dejó de tener una reflexión política en torno al problema de Colombia y por lo tanto está completamente de espaldas al país", apuntó Betancourt.
El presidente izquierdista Morales ha expresado varias veces que apoya una solución concertada al problema de las FARC y también las ha cuestionado porque cree que estos no son tiempos de levantar las armas sino de buscar el poder por la vía democrática.
Morales remarcó hoy que se siente comprometido para acabar con los enfrentamientos armados en la región y sostuvo que luchar por reformas sociales "no va con secuestros", ni con "matanzas".
Betancourt también sostuvo que las FARC están "esclerosadas" y son "autistas" ante la necesidad de adecuarse a la realidad de Colombia, pero, además, se volvió un "cartel de la droga".
"Es una guerrilla sin pueblo (…). Esto explica porque Uribe ha sido elegido, reelegido y probablemente se volverá a reelegir una tercera vez", comentó la ex candidata presidencial colombiana.
"Como si fuera poco", subrayó, los comandantes de las FARC se han convertido, a su juicio, en "burgueses revolucionarios" frente a la tropa guerrillera, gracias a la opulencia que da el narcotráfico.
Ratificó que "no hay otra opción" que la militar frente a las FARC, pero también cree, en coincidencia con el presidente Morales, en la necesidad de solucionar los problemas sociales de la juventud colombiana campesina que vive en zonas aisladas y pobres.
La ex secuestrada destacó, además, que el presidente boliviano es un ejemplo de que la izquierda puede llegar al poder por la "vía democrática" y tener éxito, como también han mostrado otras opciones de "izquierda revolucionaria" en América Latina.
A su juicio, las FARC tiene una admiración por presidentes como Morales o Hugo Chávez, de Venezuela, "pero eso no quiere decir que haya una relación clandestina" de ellos con el grupo guerrillero.
"Yo consideró que para lograr la liberación de mis compañeros, la participación del presidente Chávez es muy importante y eso no quiere decir que tenga vinculación directa con las FARC", agregó.
La franco-colombiana ya se ha entrevistado con los presidentes de Ecuador, Argentina, Chile, Perú y Brasil, desde donde llegó a La Paz, y en las próximas horas de hoy viajará a Venezuela y después a Francia, según fuentes de la embajada francesa en esta ciudad.