Por más que usted se empeñe en procurarse alguna distensión, el oficio le persigue a cualquier rincón y surgen las preguntas que encienden los debates, sin importar que de fondo se escuche al “buenón”, interpretando salsas con la elegancia y el gracejo que lo hacen insuperable: “Parece que tú te llevaste contigo mi mundo también/ procuro otras calles pero siempre llego a las mismas de ayer…
¿Qué que pienso de la reunificación de los reformistas?
Que el peor obstáculo que tienen se llama definición, no ideológica que ni la gente la compra ni los partidos la emplean, sino sencillamente de ubicación. ¿Serán un partido de Gobierno o de oposición?
Que como más habilidosos que todos en la política procurarán la fórmula más cómoda, defender la posición de que pueden desempeñar ambos roles sin desmedro de la organización, y eso aunque ellos se lo crean no les dará más resultado que continuar apagándose en la preferencia de los electores. Por deteriorada que nos luzca la actividad política, una entidad que no sea capaz de impregnar respeto, no concita admiración.
Si de lo que se trata es de andar detrás de un presidente para procurar favores, que no pierdan su tiempo que aún unificados tendrán menos fortaleza que dispersos.
En cambio, si se dispusiesen a guayar la yuca, sin apego a cargos pueden reconquistar parte del desaliento que acumulan los gobiernos, sobre todo después de una reelección, y en la medida que sume fuerza suman aprecio.
Esperemos a ver si de lo que se trata es de un anuncio de intenciones sin mayores fundamentos o de un interés real por restaurar una opción…
Sexappeal y Asdrúbal son excelentes, pero Michel es el monstruo
“Tu ni te imaginas las veces que en sueño caminamos juntos, tomado de las manos/ Tu ni te imaginas cuantas veces fuiste totalmente mía, ni te lo imaginas/ Tu ni te imaginas en mis sueños locos, lo infiel que te vuelves en mi compañía/ Tu ni te imaginas las cosas que olvidas por sentirte mía/ ni te lo imaginas/ Ni te lo imaginas que mis manos pueden dibujar tu cuerpo sin haber pecado, que tengo en mi boca sabor de tu boca y no te he besado/ ni te lo imaginas cuando conversamos que tu gran amigo es tu enamorado…
¿Qué a qué viene mister Strauss-Kahn, el director del FMI?
Parece que escuchamos por un oído lo que dijo hace dos semanas la misión encabezada por Andy Wolfe, delegado en el Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, y nos salió por el otro. Habló de la necesidad de un ajuste fiscal, que sólo tiene dos vías: reducción del gasto o establecimiento de nuevos impuestos.
Por otra parte está lo del déficit del presupuesto. El FMI acepta que tiene que ser deficitario, pero exige una identificación precisa de las fuentes de financiamiento, y buena parte del financiamiento del proyecto enviado al Congreso está en el aire. Si no se concilian esos aspectos, por más sonrisas y más poses no habrá acuerdo con el FMI, lo que dejaría a la economía dominicana sin el aval de ese tutelaje, lo que sería catastrófico para la promoción de inversiones.
El timbre de mi móvil los fines de semana, reproduce una salsa con un tema de un grupo que se llama Opus. El tema es “Mujer de la vida”: “Yo estuve enamorado de una mujer de la vida/ La conocí en un cabaret, estaba de bailarina/ Yo era muy joven, yo era un bebe, del mundo nada sabía/ cuando a un lugar la quise llevar, me dijo que era muy cara, que yo también tenía que pagar lo que otros hombres pagan/ Vendí mi alma y hasta robé, tan solo por abrazarla, pero jamás lo logré porque no hacía rebaja…
Esta vez ha sonado para una mala noticia. Me llama una amiga de la Clínica Abreu, para informarme que murió Bianca, (Vianesa Cesarina Capellán Pérez) ¡Lástima! La gorda hacía maldades pero no era mala, las hacía para contarlas. No creo que alguna de sus bellaquerías justificara su asesinato.
Supe del cuento de una dama a la que Bianca conexionó con un magnate residente en Estados Unidos, que se desvivió y gastó una fortuna en joyas. La niña siguió caminando y en el país tenía otros desempeños. Dicen que la gorda enemistó a la joven con los dos jeques con quienes ella misma la había vinculado y procedió a incautar los obsequios de ambos.
Ejercía una sexualidad muy libre y la joven se había desencariñado con ella. Gozaba con ver gozando, pero me dicen que lo único malo es que no se contentaba con ver y con los honorarios, pues si le exigían cobrar y callar, prefería morirse de hambre.
La madrugada en la que le dispararon, salía de un casino. Aspiraba a poderes similares a los que engalanaba, y tal vez por eso se confiaba al azar.
¡Descansa en paz, gorda querida, y ojalá tu asesinato no quede impune!