Tras el largo feriado de Navidad y Año Nuevo, este miércoles, el “despertar” Santo Domingo se hizo poco a poco, estando el primer lugar el movimiento de personas que se desplazaban desde tempranas horas de la mañana a sus lugares de trabajo, tanto hacia instituciones públicas como privadas.
El tránsito se mostraba fluido, sin los grandes en taponamientos acostumbrados diariamente. El comercio empezaba abrir sus puertas, más para reorganizar que para esperar su clientela.
Lo que si fue notorio fueron los grandes cúmulos de basuras, principalmente en zonas que mantuvieron grandes actividades comerciales, lo que indica que las brigadas de limpieza del Ayuntamiento del Distrito Nacional fueron pocos frecuentes durante el asueto.
