SANTIAGO.- Las autoridades del Aeropuerto Cibao, organismos de seguridad y altos jefes militares que operan en esa terminal, discutieron y analizaron la tarde del miércoles los pormenores relacionados a la salida de una pequeña aeronave con 12 personas, cuyo piloto no tenía autorización para volar.
Se dijo que todo el personal militar, de la torre de control e inspectores de Migración del Aeropuerto Cibao está bajo arresto para fines de investigación.
Una fuente del Aeropuerto Cibao dijo a DominicanosHOY.com que se actuará sin contemplación si se comprueba que hubo negligencia o complicidad en la salida de dicho avión que se precipitó al mar cerca de las islas Providenciales en Caicos.
En tanto, este miércoles familiares de 10 tripulantes y un piloto que ocupaban una pequeña aeronave que desapareció en el mar pocos después de haber despegado del Aeropuerto Cibao de Santiago, el pasado lunes, afirman que sus parientes fueron reclutados por personas que no identificaron para que viajaran a Estados Unidos de manera ilegal utilizando como ruta las islas Turcos y Caicos.
Desde el martes, la terminal aérea de Santiago está siendo visitada por familiares de las posibles víctimas, quienes buscan informaciones sobre el rumbo de sus allegados.
José Hernández y Leonidas Ramos, padres de Maritza María Hernández, una de las personas que ocupaba la avioneta desaparecida, en medio de la tristeza y el dolor, contaron que su hija se despidió de ellos al manifestarle que viajaría Estados Unidos para reencontrarse con su esposo que vive de manera ilegal en ese país y que para hacer el viaje tendría que pagar 16 mil dólares, una vez llegara a suelo norteamericano.
“Ella no tenía tanta necesidad de hacer ese viaje, pero fue sonsacada por personas que se dedican a llevar personas a Estados Unidos de manera fraudulenta”, comentó su padre mientras pernoctaba el área del Aeropuerto Cibao.
Mientras el misterio rodea la desaparición del pequeño avión, otros familiares de las víctimas dijeron que desconocían que sus parientes saldrían fuera del país.
En la avioneta viajaban Alexandra Abreu, María Abreu, Rosa Tavares, Carlos García, José Luis Rodríguez, Maritza Hernández, Casilda Rodríguez, Romulfo Herrera, Juana Ramírez y Omar Rojas.
En medio de la angustias, María Torres pariente de Rosa Tavares, dijo que nunca pudo pensar que ella viajaría fuera del país.
Torres manifestó que su pariente es pobre y le cuidaba una casa de veraneo que tiene en la localidad los Ramones del municipio de San José de las Matas en la provincia de Santiago.
“Me sorprendí cuando me informaron que la casa estaba sola porque Rosa había salido con un bulto y no había regresado”, manifestó.
Mientras un familiar de otro de los viajeros que se identificó como Marta Rodríguez, dijo que la mayoría de los tripulantes de la aeronave tenía la intención de viajar a islas Providenciales para trabajar en casas de familia.
“Mi amiga me propuso que viajara junto a ella, pero como no tenía dinero suficiente no pude hacerlo”, declaró.
El administrador del Aeropuerto Cibao de Santiago, Víctor Suárez, de donde despegó la Aeronave, pidió paciencia a los familiares de los desaparecidos y anunció que se integraron a la búsqueda dos aviones C130, una embarcación y un helicóptero de Estados Unidos.
La mayoría de los ocupantes de la avioneta son de Jarabacoa, La Vega, Santiago, San José de las Matas y San Francisco de Macorís, según se informó en la terminal aérea.
El pequeño avión despegó a las 16.00 hora local (20.00 GMT) desde el aeropuerto Cibao y una hora después su piloto, el dominicano Adrián Jiménez, se comunicó con el centro de control del aeropuerto de Providenciales, a cuyos operadores logró informar que se había presentado una emergencia en el aire, según el IDAC.
El presidente de la Asociación Dominicana de Pilotos, Pedro Samuel Domínguez, dijo a la prensa que Jiménez no estaba autorizado a operar aviones, porque sólo disponía de un permiso de estudiante de aviación de Estados Unidos.
Subraya que no sabe cómo logró salir del Aeropuerto Cibao, si éste no estaba facultado para volar aeronave con pasajeros. La aeronave tiene la matricula estadounidense N-650-LP y era operada por la empresa Atlantic Aviatión.
