Bogotá (EFE).- El ex presidente colombiano César Gaviria sostuvo que el gobernante de su país, Álvaro Uribe, ha tomado el "camino de las instituciones al servicio de una persona" que sigue el jefe del Estado venezolano, Hugo Chávez.
"Es un camino autoritario y no democrático: un gobierno sin controles", advirtió Gaviria al analizar, en una entrevista que publica hoy el diario bogotano El Tiempo, el intento del Ejecutivo de buscar en 2010 un tercer mandato consecutivo para Uribe.
El proyecto de una segunda reelección de Uribe, por la vía del referendo, está en manos del Senado, que deberá gestionarlo a partir de marzo próximo, cuando el Gobierno buscará que sus mayorías parlamentarias cambien de 2014 a 2010 la fecha en la cual el presidente pueda concurrir como candidato a la jefatura del Estado.
El pleno de la Cámara de Representantes aprobó la semana pasada la convocatoria a un referendo que permitiría la segunda reelección de Uribe en el 2014. La iniciativa fue aprobada durante una sesión extra, convocada de manera intempestiva por el Ejecutivo.
El ex gobernante Gaviria (1990-1994) y también ex secretario general de la OEA (1994-2004) dijo que "la regla más invariable es que el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente".
"Dejar avanzar el país a unas instituciones en que un gobierno y una coalición se toman todos los poderes del Estado equivale a salirnos del estado de derecho y salirnos de la democracia", expresó el ex presidente, que ejerce como director del Partido Liberal Colombiano (PLC), del que Uribe es disidente.
Gaviria consideró que su país llegará a ese extremo si el Ejecutivo y sus mayorías en el Congreso logran llevar a Uribe a otra reelección, forzada de manera inconstitucional.
Según él, la intención del Gobierno de buscar que el Senado cambie la fecha en la que Uribe pueda obtener un tercer mandato consecutivo de cuatro años es una "ficción".
La Cámara Alta no puede cambiar el texto del proyecto aprobado por la Cámara Baja, añadió Gaviria, para quien el único camino que le queda al Gobierno es el de gestionar, como lo hizo en 2005, una nueva reforma a la Constitución de 1991, que prohibía la reelección presidencial.
Sin embargo, advirtió que la enmienda puede ser inconstitucional en virtud de la sentencia de la Corte Constitucional sobre el cambio de norma que facilitó la continuidad de Uribe en 2006.
Además, dijo que le parece "muy improbable que los colombianos le quieran dar una tercera opción de continuidad al presidente Uribe".
Gaviria lo explicó en el deterioro del clima político, el declive de la economía por la crisis internacional y algunos errores de política económica, el "pésimo manejo" a la crisis de las captadoras ilegales de dinero y el "gran daño nacional e internacional" provocado por las denuncias de ejecuciones extrajudiciales.