Vivian Lubrano de Castillo, ex ejecutiva del quebrado Banco Intercontinental (Baninter), declaró este miércoles que no fingió estar enferma para conseguir que el presidente Leonel Fernández la indultara, y acusó a los medios de comunicación de publicar cosas que no son ciertas.
Aseguró que no es ella quien apareció en una lista de clientas en un salón del ensanche Naco del Distrito Nacional, sino una sobrina que lleva su mismo nombre.
Un medio de comunicación publicó que Lubrano Castillo después de abandonar el centro de salud Abel González fue a una fiesta y a un salón de belleza.
La ex banquera agradeció al presidente Fernández por haberla indultado y se quejó de que muchas personas quieren verla muerta.
La ex banquera aseguró que ella está gravemente enferma y que necesita un cateterismo urgentemente, pero no se lo han practicado porque tiene espasmos, presión alta y mareos.
"Al Presidente le puedo decir, con todo mi amor, admiración y respeto que él no se equivocó. Ahora que la sociedad no me quiera eso es otra cosa", afirmó.
Lubrano de Castillo habló para el “El Gobierno de la Mañana” desde su habitación en el Centro de Medicina Avanzada Abel González, donde volvió a ser internada.
Mientras el presidente Fernández justificó el decreto 847-08, que indulta a la señora Lubrano de Castillo, y a cuatro condenados del caso Plan de Renovación Vehicular (Renove), alegando razones meramente humanitarias y de compasión.
“Hablamos de condiciones de salud, deterioro físico y mental, razones sometidas a la Presidencia de la República para tomarse en consideración a la hora de emitir ese decreto de indultos”, explicó Fernández.
Los indultos, calificado como un insulto, ha recibido el rechazo de amplios sectores, incluido el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, a quien le resultó muy extraño.
