Gaza.- Tanques, aviones y fuerzas terrestres israelíes realizaron nuevos ataques el lunes en la Franja de Gaza y el ministro de Defensa dijo que la ofensiva contra militantes del grupo islámico Hamas en el enclave palestino continuará hasta que el Estado judío esté seguro.
Los esfuerzos internacionales por lograr un cese del fuego se intensificaron con la llegada del presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el enviado especial para Oriente Medio Tony Blair, pero parecían no avanzar más allá de las palabras.
Las víctimas mortales incluían a tres niños palestinos y a la madre de ellos, muertos cuando un proyectil hizo blanco en su vivienda en la Ciudad de Gaza y a siete miembros de otra familia, fallecidos tras una explosión en un campo de refugiados.
El Ejército israelí dijo que "varias docenas" de combatientes islamistas habían muerto desde que sus tropas ingresaron el sábado en el territorio de Gaza, controlado por el grupo islámico Hamas, con el objetivo de poner fin al lanzamiento de cohetes hacia el sur de Israel por parte de milicianos.
"Hasta el momento Hamas ha sufrido un golpe muy duro de nuestra parte, pero aún tenemos que lograr nuestro objetivo, por lo tanto la operación continúa", dijo el ministro de Defensa israelí, Ehud Barak.
Un funcionario de Hamas dijo que una delegación del grupo islamista se dirigiría a Egipto para mantener conversaciones, luego de que el país africano lanzó contactos para alcanzar un cese del fuego. Pero Mahmoud Zahar, líder político de alto rango de Hamas, instó a las fuerzas islamistas a luchar "en nombre de Dios".
Familias buscan refugio
Las batallas se intensificaron en el este de la Ciudad de Gaza y en el norte de la franja el lunes. Militantes lanzaron morteros y granadas, detonaron minas y aseguraron haber atacado un vehículo que transportaba soldados.
Una portavoz militar israelí dijo que la fuerza aérea bombardeó más de 30 objetivos, entre ellos viviendas de miembros de Hamas utilizadas como depósitos de armas, túneles, y supuestos sitios para lanzar cohetes antiaéreos.
Israel lanzó su ofensiva con bombardeos por aire el 27 de diciembre para poner fin a los lanzamientos de cohetes desde territorio palestino, en la antesala de las elecciones nacionales que se celebrarán el próximo mes en el Estado judío.
Cuatro israelíes han muerto por cohetes y morteros lanzados hacia Israel desde que comenzó la ofensiva. Un soldado israelí falleció en los combates del domingo y 48 sufrieron heridas desde el inicio de la invasión.
Los avances israelíes en territorio de Gaza han partido el territorio costero de 40 kilómetros de largo en dos zonas separadas, y las fuerzas del Ejército han rodeado su mayor área urbana, la Ciudad de Gaza.
Los residentes de Gaza necesitan con urgencia alimentos, suministros médicos y otro tipo de asistencia, pero las hostilidades dificultaban los esfuerzos de ayuda humanitaria, dijeron agencias.
Misión diplomática
El ministro de Relaciones Exteriores checo y líder de la misión de paz de la UE, Karel Schwarzenberg, dijo en Jerusalén: "No tenemos un plan específico para un cese del fuego porque el cese del fuego como tal debe ser concluido por las partes involucradas".
"Podemos ayudar, podemos mediar, podemos asistir en una solución, pero no nos corresponde a nosotros proponer las condiciones", enfatizó.
El ex primer ministro británico Tony Blair, enviado del Cuarteto de mediadores integrado por grandes potencias mundiales, dijo que la prioridad era lograr un cese del fuego.
"Estamos haciendo todo lo posible porque se termine una situación de inmenso sufrimiento y privación", dijo luego de una reunión con el presidente palestino, Mahmoud Abbas, en Cisjordania.
Sarkozy dijo que "condenaba esta ofensiva" por alejar las posibilidades de alcanzar la paz y dificultar el acceso de ayuda a los palestinos en Gaza. El mandatario francés se reunió con su par egipcio Hosni Mubarak y se dirigirá a Israel y los territorios palestinos para asistir a otras reuniones.
(Reporte adicional de Dan Williams en Jerusalén, escrito por Angus MacSwan, editado en español por Gabriela Donoso)
