Tras ser convertido en ley por el Congreso Nacional, el proyecto que crearía el Fondo de Pensiones y Jubilaciones de los Trabajadores de la Construcción fue promulgado en el plazo reglamentario por el Poder Ejecutivo.
La nueva ley 6-86, promulgada el 4 de Marzo del 1986, exigía la elaboración de un reglamento que se encargaría de regular el funcionamiento de la nueva institución y en ese sentido el presidente de la República, Salvador Jorge Blanco, instruyó al consultor jurídico del Poder Ejecutivo, Emmanuel Esquea Guerrero, a preparar la pieza para poner en operación al FOPEJUTRASICO.
Es así como Esquea Guerrero establece contactos con los directivos de FENTICOMMC, para que colaboraran en la tarea de elaborar el instrumento que daría vida al Fondo de Pensiones y Jubilaciones de los Trabajadores de la Construcción y luego de varias gestiones y esfuerzos realizados por los miembros de la Comisión de Seguimiento al proyecto se logró que el mismo fuera divulgado por la Consultoría Jurídica de la presidencia de la República.
Una vez oficializado el reglamento por el Estado dominicano y puesto en manos de los sectores de la Construcción y los funcionarios gubernamentales, encargados de poner en funcionamiento la nueva entidad de carácter social, decidieron instalar las oficinas provisionales en la segunda planta del edificio propiedad de FENTICOMMC, de la París Numero 2, esquina Josefa Brea, del Distrito Nacional, debido a que no contaban con recursos ni para pagar el local de la incipiente institución, que duró varios años en ese lugar sin sufragar un centavo.
Luego de ser instalados, con todas las precariedades y limitaciones, en los órdenes económicos y administrativos, que caracterizan a una institución desprovista de la protección estatal directa, ya que ni en ese momento, ni mucho menos ahora recibe recursos del Presupuesto Nacional, los miembros del Primer Consejo tuvieron que asumir los gastos operacionales de la misma, hasta lograr que se consiguiera un préstamo con el Banco de los Trabajadores Dominicanos de RD$ 30,000.00, debido a que el Banco de Reservas se negó a concederlo por la carencia de garantías económicas del FOPEJUTRASICO.
Para el otorgamiento de ese préstamo, el desaparecido BTD, puso como condición que cada uno de los concejales del Fondo de Pensiones y Jubilaciones de los Trabajadores de la Construcción asumiera personalmente con sus bienes la garantía del mismo.
Ese Consejo de Administración y Control, que tuvo a su cargo asumir el reto de poner en funcionamiento y desarrollar políticas, planes y proyectos, los cuales permitieron luego que arribara al crecimiento que hoy ha experimentado la institución, estuvo integrado de la siguiente manera: Pedro Franco Badía, presidente, en representación de la Secretaria de Estado de Trabajo, José Eugenio Ruiz, Vicepresidente, Juan Medina, Asesor Laboral, Agustín Reynoso, Tesorero, Isidro Saya Lora, Director Ejecutivo.
Asimismo, Luís Vargas, concejal, en representación de los Albañiles, Luís Conde Guzmán, de Obras Viales, Rodolfo García Mieses, de los Carpinteros, Virgilio Martínez, de los Plomeros y Agustín Reynoso, de los electricistas.
También formaron parte de ese Primer Consejo de Administración y Control, Nicolás Cabrera, de los TOpógrafos, Eduardo Alexis, de los Varilleros, Juan Gil Mateo, de FENTICOMMC, Ramón Guerra, de los Mosaitas, Julio César Feliz Nivar, de Amacoa, Carlos Corporan Torres, de la Federación del Distrito y Raúl Cabrera, en representación de los Pintores.
Continuará.
