Washington (EFE).- El presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, pidió hoy al actual mandatario, George W. Bush, que solicite al Congreso los 350.000 millones de dólares de la segunda partida del plan de rescate financiero, según el diario The Wall Street Journal.
En una rueda de prensa hoy, Bush había señalado que sólo pediría el dinero si Obama así se lo requería. La solicitud de Obama al parecer llegó inmediatamente después de esas declaraciones.
El Gobierno de Bush ha sufrido críticas sobre la utilización del primer desembolso, por valor de otros 350.000 millones de dólares, y la presunta falta de control del programa.
El Tesoro ha dedicado esos fondos a comprar acciones en los bancos y así proporcionarles capital fresco. También ha extendido préstamos a las empresas automotrices Chrysler y General Motors.
Tras la solicitud formal del dinero, Obama tendrá que ir al Congreso "y exponer sus razones sobre porque los 350.000 (millones de dólares) son necesarios", aseguró Bush en la rueda de prensa.
El presidente saliente reveló que "no está cómodo" con la decisión de ofrecer ayuda a los bancos, pero dijo que tuvo que dejar de lado algunos de sus principios en favor del libre mercado ante la gravedad de la crisis.
"Wall Street se emborrachó y nosotros sufrimos la resaca", señaló Bush, quien afirmó que las medidas que ha tomado su Gobierno "han ayudado a descongelar el mercado de crédito, lo que es el primer paso hacia la recuperación".
El gobernante señaló que se vio obligado a actuar después de que sus asesores le dijeran que la actual crisis económica podría ser peor que la Gran Depresión de los años 30.