Duarte.- El accionar prepotente de las autoridades actuales y ejecutorias del gobierno de Hipólito de Mejía, arrojan fuertes contradicciones con el decreto 638-08, de fecha 13 de octubre de 2008, que declara de utilidad pública los terrenos de los herederos de Joaquín Antonio Ortega Casado en San Francisco de Macorís.
Hablamos de las 4 mil tareas de tierras que las autoridades pretenden despojar de forma abusiva a la familia Ortega Casado, para construir una pista de aterrizaje. También investigaciones hechas por DominicanosHoy.com en San Francisco de Macorís demuestran que las autoridades no tienen claro el proyecto.
Informes obtenidos hablan de que el ex presidente Hipólito Mejía declaró de utilidad pública esos terrenos, supuestamente para hacer un asentamiento agrario, pero el decreto fue derogado cuando su gobierno contactó que los terrenos eran productivos.
Además, el decreto 638-08 declara de utilidad pública mil tareas de tierras, sin embargo, en documentos entregados por las autoridades a la familia Ortega Casado se especifica que solo son 300, lo que descarta el pago con plusvalía y arroja algo de oscuridad a los aprestos para la pista de aterrizaje.
Igualmente, se denunció que Isócrates Peña, del Consejo Regional de Desarrollo de la provincia Duarte, se ha excedido en su accionar, llegando, incluso, a amenazar a la familia Ortega Casado con conseguir sus propósitos a la fuerza.
“A la familia Ortega Casado no nos interesa vender los terrenos, pero en caso imprescindible, entonces que se pague el precio justo y en negociaciones claras”, enfatizó el ingeniero Joaquín Ortega González.
Continuó diciendo que “estas tierras desde siempre han sido codiciadas. Al presidente Leonel Fernández que este no es el lugar para construir esa pista de aterrizaje, que no se deje influenciar por políticos baratos, que quieren hacerle daño a su gobierno”.
Entiende que el único interés de los propulsores de la pista en esas tierras altamente productivas es acabar con la agricultura de la provincia. Sugirió a las autoridades desistir del proyecto y aprovechar los aeropuertos de Puerto Plata, Nagua, Samaná y Santiago, a este último estarían llegaron apenas dos o tres vuelos diarios.
Hasta el ecosistema y el medio ambiente se verán seriamente afectados por la construcción de la pista de aterrizaje en esas tierras.
Del despojo de los terrenos se acusan mutuamente el director del Departamento Aeroportuario, Andrés Van Der Horst y miembros del Consejo Regional de Desarrollo de la provincia Duarte. Uno de estos dos organismos manejaría la pista de aterrizaje y es el dueño de la propuesta.
La familia Ortega Casado acusa a Van Der Horst de cabildear el decreto 638-08, de fecha 13 de octubre de 2008, que declara de utilidad pública los terrenos de su propiedad y ordena al Departamento Aeroportuario pagar la indemnización correspondiente por los mismos.
Sin embargo, el director del Departamento Aeroportuario dijo a principios del año 2008 que el gobierno no tenía dinero para comprar los terrenos para construir la pista de aterrizaje, y dejó abierta la posibilidad de pagarlos con la plusvalía.
DominicanosHoy.com se trasladó a San Francisco de Macorís y comprobó que las autoridades locales conciben, sin marcha atrás, la idea del proyecto, y han vendido su importancia a los francomacorisanos, sin explicarles la destrucción y depredación masiva que esto conlleva.
Prácticamente el total de las tierras están actualmente en avanzada producción agrícola y ganadera. El resto está siendo preparada para la siembra. Y no se descarta escasez de diversos productos del agro en la provincia Duarte, si algún día, estos terrenos dejan de sembrarse.
De concebirse la pista, la depredación de árboles será sin precedentes e incluirá muchos sembrados hace más de 100 años. Además, en el centro se observan torres energéticas de alta tensión colocadas por la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
También la destrucción de esos terrenos, altamente productivos, y ubicados a seis kilómetros de la ciudad, afectará sustancialmente el río Jaya, que cruza por el centro, alimentando entre 35 y 40 bombas de agua. Asimismo, desaparecerían los arroyos la Yaguiza y El Caño.
Entre los productos que se cultivan están: café, maíz, frutas, legumbres, plátanos, Arroz, yuca, cebolla, batata y cacao, este último hasta para la exportación. Las tareas sembradas de plátanos rondan las 1,200 y mil de arroz.
La construcción de la pista de aterrizaje en esos terrenos afectará también el Proyecto Aguayo, una población de gente horrada, amable y trabajadora, situada a 6 kilómetros del m0unicipio de San Francisco de Macorís en la República Dominicana. Tiene 21, 000 habitantes.
Es un complejo habitacional construido en principio para 241 parceleros beneficiarios del proyecto Aguayo.
