(Tercera parte)
La historia haitiana no presenta un Presidente que haya hecho el esfuerzo para que el país comience a salir de la pobreza, vida saludable y progreso. En el 1975, leía muy interesado en conocer la verdad de Haití, escrita por Bernard Diedrich y Al Burt: Papá Doc y los Tontons Macoutes. Hoy, 5 de febrero de 2012, termino de leer este libro por segunda vez. Diedrich vivió 14 años dentro del pueblo haitiano. En esta obra está todo. Concibo la realidad que los presidentes de ese país tienen el plan de que los haitianos vengan y ocupen esta tierra con la idea de Toussaint. “Una e indivisible”. Lo están logrando.
¿Cuántos haitianos vemos todos los días por todas partes? ¿Cuántas haitianas vienen a los hospitales dominicanos a parir? Niños y niñas en las calles y esquinas, pedigüeños. Es la manera de los haitianos resolver sus males ancestrales. Nada se hace contra esta ocupación ilegal.
Como continúan estas irresponsabilidades ante los deberes y derechos naturales e institucionales de proteger la dominicanidad, que no logro entender, no me sorprenderé de que en unas elecciones un haitiano se postule para síndico, regidor, senador o diputado. No creo exagerar. ¿Quién realmente sabe cuántos haitianos tienen cédulas como dominicanos?
No solo están en las construcciones y fincas, véanlos en distintos negocios, hacen lo que les viene en gana residiendo en franca violación a la ley ¿Qué realmente impide actuar? Estamos padeciendo de una grave debilidad de Estado ¿Qué país no ejerce ese derecho?
La naturaleza de patria exigirá como otras tantas veces. Ahí está la historia ¿Por qué son nuestros héroes Duarte, Sánchez, Mella, los hermanos Puello, Imbert, Salcedo, Cambiaso, Maggiolo, Acosta, Duverge, María Baltasara de los Reyes y otros tantos dominicanos?
¿Hay un deber superior a la defensa de la nacionalidad dominicana? Si lo hay, necesito conocerlo, ese derecho es nuestra responsabilidad de ciudadano saberlo. No aceptamos tal indiferencia, los males contra la patria no son posibles y éste de suma importancia. Debo detener el bolígrafo. ¡Ya basta!
Nuestro invitado de hoy, Juan Pablo Duarte: “Entre los dominicanos y haitianos no es posible una fusión”.
El autor es vicealmirante retirado de la Marina de Guerra.
Meditabundo. ¿Somos dominicanos Duartianos?
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Story
Page