En apenas unos días la República Dominicana será sede del V Foro de Competitividad de las Américas (FCA), con el objetivo de “facilitar el desarrollo de los negocios y el intercambio de ideas y conocimientos entre las naciones del continente”.
El evento, organizado por el Consejo Nacional de Competitividad, será efectuado en Santo Domingo del 5 al 7 de octubre, con el presidente Leonel Fernández Reyna como anfitrión; en tanto que los participantes de diferentes países de la región compartirán sus ideas innovadoras, productivas y competitivas que puedan mejorar los estándares de vida nuestras naciones.
Sin duda alguna, en los días que corren el mercado exige mucho, sobre todo, invertir en educación, tal y como se ha reafirmado siempre. En República Dominicana, apenas el 30% de la población laboralmente activa tiene un trabajo fijo. Nadie duda de que el sistema educativo nacional deba incentivarse, más bien reestructurarse, si queremos en verdad un país democrático y capaz de desarrollar su sistema algún día.
Hablar de competitividad y democracia conduce por senderos afines, sin embargo, alcanzar las metas en cada uno de ellos implica esfuerzos que se identifican con plenitud. Desde que se inició el año 2011, se habla de logros económicos, pero aún se esperan esos drásticos cambios hacia las acciones para que el modelo dominicano avance. Lamentablemente, las discusiones políticas desgastan a quienes deben estar volcados hacia aspectos que cuenten en el desarrollo de la nación.
Este año, el Presidente de la República llamó a concientizar y profundizar en la transparencia y en el fortalecimiento de la institucionalidad. En 2010 hubo un enfoque hacia la eficiencia productiva. En definitiva, competitividad y democracia requieren más respeto a las necesidades de la población y si algo impera ante llamados de tal envergadura es el enfrentamiento tangencial a la corrupción que agrupa, de un lado de la balanza las riquezas mal habidas, conseguidas sin justificación alguna, en tanto que del otro, pesa el olvido de cuán dividida andan las condiciones de vida y qué lejana está esa equidad por la que aboga la llamada democracia.
Esperemos que este V Foro de Competitividad de las Américas (FCA), que por vez primera tiene lugar en el país, trascienda a la historia dominicana con ese intercambio de ideas y conocimientos capaces de augurar que un futuro mejor es posible.