La nota que faltaba la acaban de fraguar desde algún rincón con una clara intención, y por supuesto con el titulo de moda, ese llamado "Esteroides".
Esta vez la imagen de portada se la dedican a quien posiblemente es el más grande jugador de la actualidad y uno de todos los tiempos, que por su condición dentro y fuera del terrenos es tan intocable como un santo, por supuesto que hablamos de Alex Rodríguez.
Según un reporte Alex dio positivo por dos esteroides anabólicos durante la temporada del 2003, cuando fue nombrado JMV de la Liga Americana con los Rangers de Texas, le dijeron cuatro fuentes a Sports Illustrated este sábado.
Según el sitio SI.com, Rodríguez apareció en una lista de 104 jugadores que dieron positivos por sustancias para aumentar el rendimiento en el programa de pruebas en el 2003, y que fueron realizadas como parte de un acuerdo entre el Sindicato de Jugadores y MLB para pasar a pruebas no anunciadas para el 2004.
Ambos se pronunciaron al respecto y explicaron que esto no podía ni afirmarse ni confirmarse, pues para el 2003 no había castigo por una prueba positiva, y además la lista de los 104 jugadores que arrojaron positivo sigue bajo protección del gobierno en California.
A todo esto, se suma ese fantasma extraño xenofóbico queanda rondando siempre en los pasillos de los estadios, donde con su cara blanca entre sombras oscuras asusta a todos aquellos que de una forma u otra les cae mal por su raza o color, o cualquiera de las anteriores.
En esta oportunidad le toco nuevamente asustar a ARod, quien "casualmente" visito Santo Domingo hace pocos días y entreno con el equipo dominicano que representara al país caribeño en el clásico mundial de beisbol el próximo mes.
La cosa es que definitivamente en este mundo pueden pasar muchas cosas, y todos cometemos en algún momento un error, y para los atletas de alta competencia esto es un reto a diario en todos los deportes, es una epidemia sinuosa que parece no detenerse, pero muchos sabemos cuál es la idea.
Todo esto comenzó hace unos años atrás con Mark McGwire, también nombraron a Sammy Sosa, Rafael Palmeiro quien fue un balde de agua friísima, y así un centenar de peloteros que según el informe Mitchell tuvieron que ver con este asunto de los anabólicos.
¿Por qué esto de Alex no apareció en el 2006, cuando se realizo el primer clásico mundial de beisbol y ahora faltando pocas semanas cuando el pelotero se pronuncia por Latinoamérica, específicamente por República Dominicana, sale este anuncio sorpresivo y totalmente fuera de base?
Esta fuera de la línea, porque si esto es cierto es necesario conocer a los voceros de esta información, ya que como lo comunico el Sindicato de jugadores, cualquier persona que tenga conocimiento de este tipo de documentos y revele su contenido puede estar sujeto a violación de esas órdenes de la Corte.
En esta ocasión, están tocando al pelotero mejor pagado del juego y que por estar en una posición privilegiada siempre está envuelto en las noticias de los medios de comunicación por algun u otro tema, y aunque su nombre en el pasado no ha pasado desapercibido en el tema, tampoco ha sido un dolor de cabeza.
Lo que sí ha quedado claro en muchas oportunidades es que los americanos si no la ganan la empatan, y en el año 2006 durante el primer clásico, ellos mostraron al mundo la carita bonito de ojitos azules del tipo que cautiva fanáticos y fanáticas con su juego y sex appeal, ya que nunca permitieron que Alex representara a RD como había anunciado en principio.
¿Por qué no apareció alguien con la noticia en ese momento?
Total, ya habían pasado 3 anos.
Ahora de alguna forma u otra, la atención la quieren desviar algunas personas al tercera base del equipo dominicano, quien no es bien visto por muchos por su supuesta arrogancia o actitud, cosa que cualquiera haría si valiera $300 millones, aunque sea por seguridad propia.
El punto es que no deja de ser suspicaz la noticia, en este momento cuando todos los ojos están centrados en el clásico, cuando Roger Clemens y Barry Bonds parecen no poder levantarse, le agregan un bastón de soporte ante las caídas de inmortales y gigantescas estatuas, y es indudable que cada vez que nace uno grande aquí, nacen otros allá, pero cuando cae uno allá, es necesario que caigan algunos aquí como el gato y el ratón.
Ojala y se detenga esa manera tan agria de vivir, porque mañana no me gustaría levantarme y leer que Miguel Cabrera, Carlos Beltrán, Mariano Rivera, Francisco Rodríguez, Johan Santana, Alfonso Soriano, Aramis Ramírez, Vladimir Guerrero, Adrian González o cualquier otro de los míos está en la palestra brillando en sepia con un titular y asterisco dando positivo.
