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Real, no supuesta violación a menor haitiano

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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En Haití se investiga seriamente la acusación contra cinco soldados, cascos azules, por el abuso contra un menor. Pero, esto, aunque aparece ahora de manera escandalosa en los medios de comunicación, no es novedoso. Hace tiempo los rumores de violaciones y actos aberrantes de ese personal, previsto para mantener el orden en territorio haitiano y no para cometer viles actos, desató opiniones diversas en el mundo: pero nada sucedió.

Tuvo que hablar fuerte el presidente Martelly y condenar el hecho para que se movieran los resortes. La portavoz de la Misión de Estabilización para Haití de la ONU (MINUSTAH), Eliana Nebaa aseguró que al conocer tal situación, e identificadas los supuestos victimarios informaron a las autoridades uruguayas y ofrecieron su apoyo a las víctimas.

El ministro de Defensa de Uruguay, Eleuterio Fernández Huidobro, informará ante el Parlamento el caso “que ha levantado una fuerte polémica en el país después de que el pasado fin de semana se difundiera un vídeo del presunto abuso”.

No puede ser “presunto” un caso que a su vez recibió la denuncia de la ONG Comisión de Investigación para el Desarrollo y la Organización de Port Salut (Credop).Además, el vídeo “difundido por la televisión uruguaya muestra a cuatro soldados uruguayos alrededor de un joven civil haitiano que se encuentra recostado boca abajo mientras es sujetado por algunos de los militares”.

El resto de la filmación resulta más que macabra, inescrupulosa, horrenda y dolorosa para el muchachito a quien muestran las imágenes grabadas con un celular: “los soldados le bajan el pantalón y uno de ellos semidesnudo se arrodilla a sus espaldas entre las risas generalizadas”.

No basta la repatriación de los cinco militares parias, investigados, ni que la ONU “tenga en sus manos el asunto”.

No solo la presidencia haitiana “condena vigorosamente este acto que subleva la conciencia nacional y espera un informe detallado», el mundo entero espera respuestas y esta vez sin dilaciones ni apañamientos posibles que pueden dejar impunes a culpables de tal envergadura.

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