Alguien fuera del Dios Todopoderoso tendrá algún día en la tierra que valorar la labor desprendida de hombres y mujeres altruistas y filántropos que realizan en beneficio del desarrollo de las comunidades.
Hace diez años exactamente que la Fundación Corazón Divino abrió un camino en el corazón del municipio de Neyba, en la provincia Bahoruco, con el objetivo de acompañar aquellas jóvenes adolescentes que, viviendo con sus padres y las que cada día se exponen en las calles a merced del peligro y las violaciones, salen con embarazos muchas veces no deseados, corriendo el riesgo inmediato de ser echadas de sus casas, recibiendo de esta manera la exclusión y el rechazo de toda la sociedad.
A partir del estigma y la discriminación a que son sometidas nuestras menores y adolescentes es que surge una tarde del año 1999, en Santo Domingo, la idea y la inquietud de un grupo de personas encabezado por la licenciada Birmania Angelita Martínez Abreu, de crear un espacio de acogida para las niñas que a destiempo salen embarazadas, por lo que decidieron entro todos y todas dar a la luz pública el surgimiento de la Fundación Corazón Divino.
Además de Angelita Martínez debemos mencionar a Julio Díaz Capellán, Brucela Díaz, Luis Antonio Serrano, Scarlett del Castillo, Carmen Benítez Campusano, Lázaro Monteagudo y Claribel Mercedes quienes fueron de los primeros mentores de la institución, de los que sólo quedan en su directiva los dos primeros.
La licenciada Martínez Abreu despacha una carga de lamento cuando lanza un grito que se escucha en el cielo, al expresar que el radio de acción de la Fundación Corazón Divino es amplio y que los recursos son muy limitados, motivo por el cual se han visto en la obligación de aplazar proyectos y dejar de lado programas a favor de las jóvenes para las cuales trabajan.
Esta noble entidad ha atenido que sustentarse en actividades de autogestión para poder continuar con la meta que se ha trazado. Para ello la Fundación ha tenido que apelar a las rifas, ventas de bonos, cooperación de sus miembros y al sometimiento de proyectos mancomunados con otras instituciones nacionales y de cooperación internacional, de manera que ayuden a estabilizarla económicamente.
La Fundación Corazón Divino, fue incorporada mediante el decreto N0. 313-00, del 12 de julio del 2000.
Su misión es convertir la Fundación Casa Hogar Corazón Divino, Inc., en una Institución sólida y útil en el transcurrir del tiempo y de generaciones, que contribuya con el desarrollo local y nacional a través de programas sociales como son la salud, el Medio Ambiente, la Cultura, el deportes y la educación, en donde las madres que trabajen puedan dejar sus hijos en buena manos mientras se alfabetizan y aprenden algún oficio
Uno de los propósitos de la Fundación es crear centros vocacionales de formación técnica, escuelas y aldeas infantiles y casas de acogidas, con apoyo asesorías e iniciativas que conlleven al bienestar de los niños y gentes humildes de los pueblos.
La Fundación apuesta a la construcción de un país justo y humano, donde los dominicanos vivan en armonía y en pleno disfrute de sus derechos tal y como lo soñaron los forjadores de la nacionalidad: Juan Pablo Duarte, Ramón Matías Mella y Francisco del Rosario Sánchez.
La licenciada Martínez informó que la Fundación Divino Corazón ha recibido el apoyo del Infotep en la impartición de cursos de belleza, costura, ventas, almacén, contabilidad, cultivador de uvas, aplicador de pesticidas, vinos, criador de chivos y ovejas, productor de hortaliza, etc.
Actualmente trabaja con el programa de la Secretaria de Estado de Trabajo Juventud y Empleo y Desarrollo Juvenil, donde somos pioneros de ese programa en la provincia Bahoruco, donde se impartirán más de veinticinco (25) cursos y talleres en diferentes áreas este año.
