La posibilidad de “un acercamiento con el Partido Reformista Social Cristiano para reagrupar, entre otras cosas, a los balagueristas y reformistas dispersos y trazar una estrategia común de trabajo, para formar una tercera dimensión de la esperanza”, son propósitos del asesor del Gobierno dominicano en materia de drogas y presidente de la Fuerza Nacional Progresista (FNP), Marino Vinicio Castillo Rodríguez, Vincho, dados a conocer a través de diferentes espacios en los medios de comunicación del país.
Para el abogado y político, el abandono de una posible reelección por parte de Fernández le “hizo perder”. Pero, a su juicio, él es un “mal perdedor” y aunque valora al presidente como un hombre esencialmente decente, “que llega a la ingenuidad”, porque según su criterio, comete el error de creer que los demás piensan bien, considera que Leonel debía “tiguerarse”.
El caso es que, en medio de las divisiones y erradas posturas del partido blanco y el morado y las decisiones del rojo de elegir su aspirante presidencial por medio de una asamblea de delegados, sin celebrar primarias, Castillo rememora su compromiso de volver al seno de su partido, para relanzar “a la pequeña y aguerrida” Fuerza Nacional Progresista, que en este caso se formula a través del “trabajo conjunto con el Partido Reformista, del cual ya tenemos un antecedente histórico”… dijo, con el añadido de que “cada quien hará su trabajo” y “habrá coincidencia en actividades conjuntas”.
Vincho Castillo apunta lo que es una realidad incuestionable: todo este proceso se desarrolla en una situación de crisis, no sólo nacional, sino también mundial. Y aunque el también presidente de la Comisión de Ética no se ve a sí mismo separado o contrario al presidente, acepta tener más obligaciones que cumplir, no son sólo con Leonel Fernández, sino con el país.
“La idea es que se haga lo que al país le conviene”, concluye Vincho y esgrime la propuesta de: “Una tercera dimensión de la esperanza”.
Lamentablemente, sin esgrimir pesimismos, los tiempos esperanzadores parecen haberse extinguido en el horizonte dominicano… Ya veremos.
