Alrededor de 500 presos han escapado hoy de una prisión de Kandahar, en el sur de Afganistán, a través de un túnel de 360 metros excavado durante cinco meses. Los reclusos, talibanes en su mayoría, estaban en el bloque de la cárcel que aloja a los convictos políticos.
"Un túnel de varios cientos de metros ha servido para escapar a 476 presos políticos", ha dicho el director de la prisión, el general Ghulam Dastageer Mayar, una información confirmada por el Gobernador de la provincia, Tooryalai Wesa.
Sin embargo, la policía afgana sólo confirma la fuga de 400 de estos presos. Por su parte, los talibanes han reivindicado esta fuga, que según ello ha permitido salir de la prisión a 541 presos (106 comandantes), en un comunicado.
Las autoridades afganas definen como prisioneros políticos a los comandantes o militantes talibanes que no han sido detenidos en combate o ataques terroristas. Waheed Omar, portavoz del presidente Hamid Karzai, ha calificado la fuga de "desastre que no debería haber ocurrido".
Un dirigente talibán ha indicado que la excavación del túnel comenzó en el exterior de la cárcel y que tardaron cinco meses en alcanzar la zona en la que están recluidos los presos fugados. Según esta misma fuente, los talibanes rescataron a los presos con un cordón de suicidas por si las fuerzas de seguridad descubrían la fuga. "La puesta en libertad comenzó a las once de la noche (19.30 de ayer, hora española) y sólo tres presos conocían el plan", explica el dirigente talibán en una nota difundida por una agencia de noticias afgana. "Fueron despertando a los compañeros uno por uno. El último salió a las tres y media de la madrugada".
"Ha sido un golpe duro", ha dicho el portavoz del presidente en una rueda de prensa. "Estamos investigando qué ha ocurrido exactamente y qué debemos hacer para reparar el desastre que ha tenido lugar en Kandahar".
A pesar de todo, el Gobernador de Kandahar ha asegurado que algunos de los fugados habían sido detenidos de nuevo, aunque no se ha precisado el número. Además, se ha puesto en marcha una "amplia operación de búsqueda en los alrededores de Kandahar". En cualquier caso, ha admitido que la fuga ha cogido por sorpresa a las fuerzas de seguridad y servicios de investigación.
Esta es la segunda fuga masiva de esta cárcel de Kandahar. En 2008, alrededor de mil presos escaparon de la prisión, después de que los talibanes destrozaran las puertas mediante la explosión de una bomba oculta en un camión.