Una victoria anunciada…efectivamente, fue lo que ocurrió en el Madison Square Garden de Nueva York la madrugada de este domingo tras el boricua Miguel Angel Cotto derrotar, por nocaut en el quinto asalto, al británico Michael Jennings.
Con este contundente triunfo Cotto ha regresado a la cima del boxeo internacional y, de paso, capturó el título welter (147 libras) -que estaba vacante- de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
La pelea, que transmitió, vía satélite un canal de México, se tornó en todo su breve trayecto a favor del puertorriqueño que mejoró su foja en 33-1 con 27 victorias por la vía del sueño.
En los primeros dos rounds prácticamente hubo un solo hombre en el cuadrilátero y lo era Cotto, quien con precisión, logró conectar explosivos puños al cuerpo del Jennings.
Aunque pudo sobrevivir el tercer y cuarto asalto, el británico se vio una presa fácil para el otra vez monarca mundial welter.
Cuando había pasado poco más de un minuto del quinto round, Cotto arreció su ofensiva, la cual fue determinante para que la pelea concluyera a su favor.
En el tercer round el británico fue al piso producto de una perfecta combinación -gancho aterrizado a las costillas y recto corto al rostro- lo que lo iba acomonando para su feliz victoria.
CAYO TRES VECES
Jennings fue tres veces a la lona al recibir explosivos guantazos del nuevo rey omebeísta de las 147 libras.
En las tres ocasiones que Jennings fue al piso fue producto de la misma combinación: Gancho izquierdo al costado y recto corto a la cara.
Ya en el quinto todo estaba preparado para el fatídico final de Jennings, quien con el conteo del árbitro de los diez segundos, le fue decretado el fracaso. Fue apenas la segunda derorta del británico en 36 subidas al cuadrilátero.
Cotto, el pasado 26 de julio, fue vapuelado por el mexicano Antonio Margarito, quien le arrebató el cinturón welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Pero con éxito, siete meses después de su fracaso ante Margarito, se reecuentra con la gloria y, lo más probable, su próximo comporomiso podría ser una pelea de revancha -y millonaria- con el estadounidense Shane Mosley, a quien derrotó por decisión unánime en un pleito celebrado también en Nueva York.