El próximo 16 de este mes, el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), celebrará el Tercer Congreso Unitario Joaquin Balaguer, en el cual se analizará la situación de esta organización política y se trazará el nuevo rumbo que deberá tomar para crecer, desarrollarse y sobre todo, retomar el poder.
Llama la atención que a la víspera del citado congreso, a realizarse en la República Dominicana, trascendiera y se diera a conocer la noticia en la ciudad de Miami de la renuncia irrevocable del reconocido dirigente reformista Mariano Marcelo, quien fuera secretario general del PRSC, filial Florida. Considerado como una de las figuras emblemáticas del reformismo en el Sur de la Florida.
Según lo expresado en comunicado de prensa que dio a conocer, el motivo de su renuncia y separación de las filas del partido rojo obedecen al descontento que experimentaba dentro de esta organización a la que por tantos años perteneció.
Debe llamar a reflexión al Ing. Carlos Morales Troncoso, presidente del PRSC, y a los altos dirigentes de la cúpula esta importante y significativa pérdida del legendario compatriota, como lo es Don Mariano. Un hombre que goza de gran respeto y credibilidad no solo en esta filial, sino también, en la comunidad.
El PRSC, filial Florida ha sido totalmente abandonado a su suerte. En otras palabras, las altas instancias del Partido Colorao, no han prestado la debida atención, ni le han dado seguimiento a los trabajos que esta filial viene realizando a “mano pela”. Hasta la fecha, ningún dirigente ha venido por estos predios a traer alguna planificación y/o esquema de trabajo, mensaje alguno, mucho menos a hacer contacto con los reformistas de aquí. Excepto, el senador higueyano Amable Aristy Castro, quien en estos días estuvo de visita por la ciudad del Sol y se reunió con algunos dirigentes para dar a conocer sus aspiraciones presidenciales con miras al año 2012.
No obstante a esta orfandad y la falta de recursos en la que tienen sumergida esta filial, hay que reconocer el valioso trabajo y los aportes significativos que realizan los reformistas de Miami. Tal es el caso de su presidente, Ángel González (lucho), quien aspira a la diputación de ultramar, y quien por espacio aproximadamente de 11 años realiza un programa radial de orientación reformista, pagado de su propio bolsillo. De igual manera, el Dr. Luis Manuel Campillo, quien mantenía un local del PRSC en esta ciudad.
Lo irónico de todo esto y para darles un dato, es que se está anunciando con bombos y platillos la celebración de este congreso, el cual se iniciará el 16 de Enero y concluirá el 5 de Febrero, con la participación que en un principio se dijo de 1,650 delegados, pero que según las últimas declaraciones de Morales Troncoso, se ha reducido a 1,200 delegados; de unos 4,500 que era la cuota inicial – participativa. A todo esto hay que agregar que todavía ninguno de los dirigentes de esta filial, incluyendo los que pertenecen al Directorio Nacional, a la Comisión Ejecutiva y a la Comisión Política han sido invitados.
Da la sensación, y así lo manifiestan algunos compatriotas que allí solo participaran los reformistas allegados y simpatizantes del proyecto político del Ing. Morales Troncoso.
¿Por qué hay exclusión? ¿Cuál es el miedo de no realizar este congreso abierto apegado a un orden democrático? Sólo ellos lo saben…
Hay un sentir generalizado en la militancia y las bases reformistas que claman y exigen un Partido Reformista Social Cristiano independiente y opositor, el cual debe distanciarse del gobierno de turno y por consiguiente, trillar su propio camino para poder ser opción de poder en los comicios venideros de 2012.
Es un compromiso ineludible que tienen los verdaderos balagueristas-reformistas de defender y continuar la obra y legado del extinto líder Joaquin Balaguer. No permitir los aprestos de algunos dirigentes que forman parte del tren gubernamental que pretenden sustituir el balaguerismo por el Leonelismo.
Es tiempo de hablar de unidad, pero con criterios firmes y sinceros, no predicar hipócritamente este llamado en donde solo un grupo se está beneficiando personalmente, sacrificando a la gran mayoría que representan.
Esperemos que de este congreso surja un nuevo PRSC, cuya plataforma sirva no sólo para reorientar a toda su militancia, sino también a sus dirigentes, que entiendan la necesidad de cambios urgentes a lo interno de esta organización, reconocer y enmendar los errores cometidos. Pero, sobre todo, elaborar una agenda acorde a las necesidades de las grandes mayorías, ¡que sea la misma de todo el pueblo dominicano!