LONDRES.- La crisis que afectaba a los viajeros en Europa a pocos días de la Navidad, mejoraba el miércoles aunque continuaban las demoras en los aeropuertos y en los servicios de trenes, en particular en el aeropuerto Heathrow, donde cuadrillas de trabajadores seguían esforzándose por remover el hielo.
Funcionarios del aeropuerto Heathrow dijeron que centenares de vuelos iban a partir el miércoles, pero el itinerario de vuelos seguían siendo considerablemente limitado mientras el personal de pistas trataba de retirar el hielo acumulado y despejar la nieve de las explanadas. Heathrow reabrió su segunda pista de aterrizaje el martes por la noche pero a los viajeros se les seguían recomendando que verificaran con sus aerolíneas antes de dirigirse al aeropuerto.
El aeropuerto de Francfort, en Alemania, dijo que los horarios seguían demorados mientras trataban de volver a la normalidad después de varios días de retrasos generalizados debido al clima invernal. Unos 70 vuelos fueron cancelados el miércoles de un total de unos 1.300 diarios, una notable mejoría con respecto a las 550 cancelaciones del día previo.
El gobierno francés informó que un 15% de los vuelos fueron cancelados el miércoles en el aeropuerto Charles de Gaulle, de París, debido a la inclemencia del clima.
El servicio Eurostar, que brinda transporte ferroviario entre Inglaterra, Francia y Bélgica, dijo que sus rutas operaban de manera casi normal. Aún así instaba a que sólo sus clientes con boletos se presentarán en su terminal, después de haber enfrentado a multitudes desordenadas por sus instalaciones a principios de semana.
Las temperaturas gélidas continuaban afectando a partes de Europa.
En Dinamarca el frío fue el peor en 29 años con una temperatura de 22,5 grados Centígrados bajo cero en la localidad de Holbaek, a 65 kilómetros (40 millas) al oeste de Copenhague. Sin embargo, en el aeropuerto internacional de Copenhague se tenía previsto normalidad en los vuelos.
Los servicios meteorológicos anunciaban nuevas nevadas para Inglaterra y Gales, aunque no en Londres, donde las temperaturas se moderaron ligeramente, dando esperanza a que la nieve y el hielo se derritan pronto.