Santiago.- Las lluvias que se han registrado en las últimas dos semanas en la zona, han provocado nuevos deslizamiento en la carretera turística Luperón que une a la provincia de Santiago con Puerto Plata y la Costa Norte.
El viernes y el sábado en la Cordillera Septentrional donde se encuentra la carretera turística, se registraron lluvias y las mismas produjeron ligeros deslizamiento, según denunciaron choferes y moradores de la zona.
Los derrumbes mayormente se registran en los trayectos de Palo Quemado, la Cumbre de Juan Veras, Entrada de Pedro García, Loma Fría, la Tinajita, el Mango y la Curva de Yásica, comunidades pertenecientes a las provincias de Santiago y Puerto Plata.
El dirigente comunitario Roberto Abréu dijo que cuando la vía estaba buena se podía hacer un recorrido desde Santiago a Puerto Plata en apenas 30 minutos.
No obstante, explicó que debido a los derrumbes y el progresivo deterioro que presenta, los choferes y conductores que se arriesgan a utilizar esa vía toman un promedio de hora y media y más para hacer el recorrido entre las dos ciudades norteñas.
Abréu recordó que los residentes en las comunidades ubicadas en el trayecto de la carretera Luperón están cansados de exigir su reparación y la construcción de gaviones para evitar los constantes deslizamientos, pero que no se les hace caso.
Reveló que como consecuencia de los derrumbes que provocaron los aguaceros de febrero y marzo del 2009, más de 70 familias perdieron sus casas y muchas siguen viviendo en casas alquiladas, arrimadas entre familiares y otras tuvieron que abandonar el lugar porque los perdieron todos.
Se quejó porque ninguna autoridad ha ido en auxilio de esas familias que también fueron víctimas de los derrumbes, igual que las de Carlos Díaz en Tamboril.
Asimismo, explicó que en más de tres ocasiones los chóferes y moradores de la zona se han vistos obligados a lanzarse a paros exigiendo la reconstrucción de la importante vía, pero que no se le hace caso.
A esto se añade, de acuerdo al comerciante Pedro Tavárez, la quiebra de numerosos establecimientos comerciales que expedían a los turistas artesanía y productos agrícolas y pecuarios propios de esas comunidades.
El periodista Juan Enrique Tavárez quien es nativo de Yásica, una de las localidades ubicadas en la carretera Luperón, dijo que los derrumbes ocurren con cualquier llovizna.
"Es más me atrevo a llegar más lejos, la tierra estás, tan movediza que hasta con la brisa comienzan los desprendimientos, se debe hacer algo por la gente que vive en ese tramo", estimó el comunicador.