Las Estancias Infantiles son una de las maravillas de la seguridad social, creadas para eliminar la desprotección de la población infantil y ofrecer una intervención estatal oportuna que impida el auge de la delincuencia en el país, sostuvo la directora de la DIDA, Nélsida Marmolejos, al referirse a los centros creados por el Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS).
Marmolejos manifestó que miles de trabajadores con salarios que no llegan a los 10 mil pesos mensuales, salen a trabajar dejando sus hijos/as menores desprotegidos/as, situación que el Sistema de Seguridad Social busca cambiar al estar concebido para ofrecer a la población protección en salud, educación integral y servicios, desde los 45 días a los 5 años de edad a través de las Estancias Infantiles.
Señaló que en la actualidad sólo 6 mil 236 niñas y niños han accedido a las Estancias Infantiles cifra que, a su entender, es insignificante comparada con la cantidad de menores de edad dependientes de personas trabajadoras que están en estado de desprotección, “estos centros de cuidado son la mejor inversión en seguridad que tiene el Sistema”.
Actualmente existen 63 centros de este tipo a nivel nacional, 46 habilitados y 18 en proceso; están en funcionamiento desde hace un año, y son administrados y regulados por el Instituto Dominicano de Seguros Social (IDSS), el Consejo de Estancias Infantiles y el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI), en interés de conjurar la proliferación de delincuencia que se vive en los barrios, fruto del abandono y la carencia en salud.
A juicio de la titular de la DIDA, el modelo de Estancias Infantiles, debe revisarse porque no está funcionando como debe ser. Los niños y niñas no tienen la atención que necesitan en el momento adecuado y son presas de las injusticias de la modernidad y la violencia que ven diariamente en su entorno.
Consideró que se precisa una revisión y adecuación de la Ley 87-01, para adecuar la forma de financiamiento de las Estancias Infantiles, equivalente actualmente a una fracción de los aportes que hacen los trabajadores y empleadores al Seguro Familiar de Salud (SFS).
Al referirse a los avances del SDSS, Marmolejos precisó que su proceso de inicio fue ideado para 10 años, y en el 2007 inició el SFS, “y con todo los retrasos y atrasos que incluyen hasta falta de actas de nacimientos de la población, desde el 2001 a la fecha, se ha avanzado bastante y, aunque no es un sistema ideal, es posible.
Precisó, además, que la inclusión de algunas patologías y enfermedades de alto costo, en el Plan de Servicios de Salud (PDSS) no ha sido suficiente porque una gran cantidad de personas no tienen acceso a procedimientos modernos, que son menos dolorosos y traumáticos, por que “debemos hacer equilibrio para que en última instancia la satisfacción sea para el afiliado y pensar en el desarrollo tecnológico y el equilibrio financiero”.
Respecto a los avances del Sistema de Pensiones, Marmolejos estimó que tener dinero guardado no sirve para nada, y argumentó que este régimen está concebido para ser invertido y ganar beneficios; es una protección social a largo plazo.
