Esperanza, Mao.- Cuatreros dominicanos y haitianos descuartizaron en la madrugada del domingo catorce vacas lecheras e hirieron otras tres a puñaladas en una finca de la comunidad de Peñuelas de este municipio.
El propietario de las reses Rafael Vargas, dijo que los ganaderos de la zona se sienten desesperados por la ola de robos.
Subrayó que cada una de las reses tiene un valor el mercado superior a los 50 mil pesos y que la mayoría estaban paridas y otras preñadas.
Vargas narró que los delincuentes, después que descuartizaron las catorce vacas, apenas pudieron cargar con la carne de seis reses y las demás fueron dejadas abandonadas en la finca.
Reveló que con el hecho de ayer suman seis las veces que su ganado ha sido victima de los cuatreros.
Según las versiones, los delincuentes viajaban en una camioneta color blanco y supuestamente procedían de la ciudad de Santiago.
Oficiales del Departamento Contra Robos de la Policía Nacional del municipio de Esperanza se presentaron al lugar de los hechos para realizar un levantamiento.
El ganadero Rafael Vargas lamentó la inseguridad que viven los ganaderos de esta zona y pidió a las autoridades mantener una vigilancia constante en la comunidad de Peñuelas para evitar que otros criadores de vacas sean víctimas de los ladrones.
“Hay bandas que se dedican a sustraer ganado de las propiedades ajenas en todas estas zonas, pero lo lamentable es que cuando son apresados por la Policía, la justicia los pone en libertad de inmediato”, lamentó el empresario.
En ese sentido, Vargas atribuyó al Nuevo Código Procesal el hecho de que los delincuentes son dejados libres fácilmente luego de cometer cualquier hecho delictivo.
Reveló que en los tiempos del gobierno de Rafael Leonidas Trujillo este tipo de acontecimiento delictivo no era muy frecuente debido a que los ladrones debían pagar el precio con cárcel y castigos bien fuertes.
