Tal y como se publica en estas mismas páginas, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), ayudará al país “en la formación de 25.000 jóvenes y amas de casa en el área de seguridad alimentaria, nutrición e inocuidad de los alimentos”.
Todo esto forma parte de ese abanico de acciones dirigidas a enfrentar la carencia de alimentos y enfrentar así el hambre y la desnutrición mundial que, específicamente, en la República Dominicana afecta a mayorías.
Un trabajo de Gastón Neffenrecuerda que la producción de alimentos debe duplicarse hacia el año 2050, en función de
esa presión demográfica sobre la oferta de alimentos que, tal y como refiere Thomas Malthus (el autor lo cita), el crecimiento de la población es mucho más rápido que la posibilidad de multiplicar los peces y los panes.
Sin embargo, la imposibilidad de alimentar a todos los habitantes del planeta en un futuro sigue siendo una constante, pues se enfrenta la realidad de no poder “duplicar la producción de alimentos para atajar la demanda alimentaria que se proyecta para 2050”.
Se habla de un crecimiento la población mundial en más de 3.000 millones de personas, unos 9.100 millones para 2025, según la FAO.
Aunque el criterio general es que sólo la tierra podrá salvarnos y algunos aseguran que “el suelo es más valioso que el oro” no sólo las tecnologías de agroquímicos y otros métodos afines serán la clave para intensificar y hacer eficiente la agricultura. La producción de alimentos circunscribe programas de investigación y esfuerzos múltiples que posibiliten el incremento y desarrollo de este sector.
Muchos países andan por las prácticas de manejo agronómico: elección de variedades e híbridos, estrategias de fertilización y manejo eficiente del agua, entre otras cuestiones, tal y como plantea el artículo de Neffen en el caso de Argentina, pero que atañe a todos, en su mayoría.
El clima, suelo, el acoso de plagas y enfermedades implican ajustar las decisiones de manejo de los recursos; especialistas en el tema aseguran que “la falta de una asociación correcta entre las tecnologías adoptadas y la oferta ambiental” actúa como una de las principales causas del déficit de rendimiento.
Ya veremos aquí los resultados en la labor de estos más de 20 mil jóvenes y amas de casa, que se formarán con el apoyo de la FAO en el área de seguridad alimentaria, nutrición e inocuidad de los alimentos.