Mueren 12 personas en jornada de protestas y saqueos en Venezuela

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Doce personas murieron la madrugada del viernes en zonas populares de Caracas, la mayoría electrocutadas, durante una nueva jornada de protestas antigubernamentales que derivó en saqueos, dijo el Ministerio Público venezolano.
 
En Petare, una de las barriadas más grandes de Latinoamérica, Mervins Guitian murió por un disparo en una situación que la Fiscalía dijo que investiga.
 
«Fue asesinado durante la protesta esta noche (madrugada del viernes) ¡Exigimos se investigue y castigue a los culpables!», dijo el alcalde de Sucre, el opositor Carlos Ocariz.
 
Hasta el miércoles, ocho personas habían muerto en medio de la más reciente ola de manifestaciones contra el Gobierno socialista de Nicolás Maduro.
 
El ambiente político se caldeó a fines de marzo luego que el Poder Judicial se arrogara prerrogativas del Parlamento dominado por la oposición, generando protestas en casa y llamados internacionales a respetar la democracia.
 
Las protestas se han ido tornando violentas y el viernes en la madrugada derivaron en saqueos. En El Valle, otra zona popular de Caracas, murieron 11 personas, la mayoría electrocutadas y el resto por «heridas causadas por armas de fuego», dijo el Ministerio Público en un comunicado.
 
Más temprano, un bombero que estaba en el lugar dijo a Reuters que ocho personas habían muerto electrocutadas cuando intentaban sustraer equipos de una panadería.
 
Martín Ochoa, un vecino que ayudó en la limpieza de una pequeña tienda de víveres que fue completamente desvalijada, relató a Reuters que «empezaron a quemar cauchos y después, como no tenían nada mejor que hacer, se vinieron acá a saquear».
 
«Se llevaron todo: la caja registradora sin dinero, los cables, hasta los grifos del agua. La poca comida que había se la llevaron. Lo primero que se llevaron fue el licor. Había como 600 personas, hasta una mujer embarazada», agregó.
 
Restos de neumáticos quemados, árboles cortados y basura amontonada yacían a los lados de las vías en El Valle y otras zonas de clase media y baja de Caracas. También se pudieron ver cartuchos de balas de goma y restos de bombas lacrimógenas usados por los uniformados para contener los disturbios.
 
El viernes, Caracas permaneció fuertemente resguardada por las fuerzas de seguridad.
 
PRETENDEN «GUERRA CIVIL»
 
Entre gritos de «libertad» y «no más dictadura», la oposición ha prometido seguir protestando para exigir elecciones anticipadas, la liberación de un centenar de presos políticos, independencia de los poderes públicos y la apertura de un canal humanitario que mitigue la escasez de alimentos y medicinas.
 
A pesar de las exigencias y de los reclamos de varios Gobiernos de América y Europa, Maduro ha replicado que la democracia venezolana goza de buena salud y ha pedido que cese el intento de «golpe de Estado».
 
«De nuevo esta derecha está al margen de la Constitución, de nuevo ha lanzado su odio, y estamos en pleno desarrollo de un golpe de Estado que lo vamos a derrotar», dijo el viernes el vicepresidente del país, Tareck El Aissami.
 
«Pero de esta espiral de violencia terrorista vamos a salir victoriosos», agregó señalando a la oposición de la mayoría de las muertes durante las protestas en las últimas tres semanas.
 
A pesar de que Venezuela, dueña de las mayores reservas de petróleo del mundo, sufre la inflación más alta del mundo y se encamina a su cuarto año de recesión, El Aissami dijo que la economía «está creciendo».