A esta redacción ha llegado la información de que al menos tres de los apresados por el caso de los sobornos de Odebrecht, han estado contactando médicos en el país y Estados Unidos indicándoles que no se sienten bien de salud, en busca de ser favorecidos con una medida preventiva menos severa: la prisión domiciliaria.
Estos “tutumpotes” alegan que si Radhamés Segura y Roberto Rodríguez fueron favorecidos por esta causa, a ellos, el juez especial Francisco Ortega Polanco, deberá tratarlos de la misma forma, dijo una fuente.
“Ha habido llamadas, se comienzan a mover. Dicen que tienen mareos, están pidiendo auxilio médico por ansiedades y dolor de cabeza; sin embargo, cuando disfrutaban de las comodidades no tenían nada”, agregó.
La fuente se quejó de que en este país donde en las cárceles hay mujeres que dan a luz sin la más mínima atención y hay personas enfermas de terminales que no reciben atención, a los encartados en el caso Odebrecht se le esté acondicionando las celdas donde deberán pasar algunos meses.