El ministro de Educación, Andrés Navarro, encamina un programa dirigido a incrementar la inserción de los jóvenes en el sector laboral, para lo cual encabezó este lunes el taller “Estrategia para el Fortalecimiento y Ampliación de la Modalidad Técnico-Profesional del Nivel Secundario”, en la capital.
La iniciativa, promovida por el Ministerio de Educación con apoyo del Fondo Multilateral de Inversiones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), es coordinada por el viceministerio de Asuntos Técnicos y Pedagógicos, y cuenta con la participación de una comisión público-privada que se encargará de liderar un proceso de consultas a través de mesas de trabajo, a los fines de integrar los aportes de ambos sectores en esa oportuna política educativa de formar bachilleres con las competencias necesarias, acordes con las necesidades imperantes en el sector laboral.
El ministro Navarro pronunció el discurso central del evento, con un enfoque directo en torno al mandato presidencial de asumir como política de Estado la conversión de los tradicionales liceos públicos en institutos politécnicos, ante la realidad de que los bachilleres salidos de esa última modalidad, alcanzan con mayor facilidad y rapidez insertarse en las diferentes áreas del mercado laboral.
El funcionario destacó el valioso compromiso exhibido por el sector empresarial y de otros actores vinculados a la lucha por el desarrollo de la educación, “en una voluntad clara por tributar para cambiar urgentemente la realidad que vive el sistema educativo, a través de mecanismos participativos, abiertos y transparentes”.
Precisó que el país cuenta con el personal técnico humano, los recursos, la infraestructura logística para emprender con éxito ese oportuno objetivo “que se ha planteado la Revolución Educativa de transformar los liceos en politécnicos que permita dejar atrás en el más corto plazo, esa realidad de que el 70 por ciento de los jóvenes preuniversitarios no ingresan a las universidades por falta de oportunidades laborales, y que alrededor del 80 por ciento de los bachilleres terminan sin competencia alguna para insertarse en el empleo con el nivel que exigen los nuevos tiempos”.