Nueva York.- Las personas con enfermedades pulmonares crónicas suelen tener bajo peso o estar malnutridos. Un nuevo estudio revela que la orientación nutricional les permite aumentar algo de peso y mejorar algunas habilidades funcionales.
Para el estudio, el equipo de la doctora C. Elizabeth Weekes, del Hospital St. Thomas en Londres, reunió a 59 personas con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), un término paraguas para trastornos pulmonares como el enfisema y la bronquitis crónica.
Al azar, los participantes recibieron asesoramiento nutricional sobre fortificación de alimentos o un folleto con consejos alimentarios (grupo de control). El asesoramiento duró seis meses y el equipo controló a los participantes durante otros seis.
El consumo diario de calorías y proteína fue significativamente mayor en el grupo que había recibido el asesoramiento que en la cohorte de control, según publicó la revista Thorax.
Quienes recibieron orientación aumentaron unos de 2 kilos de peso en los primeros seis meses y lo mantuvieron, mientras que el otro grupo adelgazó unos 3 kilos en los 12 meses del estudio.
Asimismo, las habilidades funcionales y los síntomas, como la disnea, disminuyeron en los pacientes que habían recibido asesoramiento, y muchos de los cambios se mantuvieron durante el seguimiento.
En cambio, el equipo observó que la intervención alimentaria no tuvo efecto alguno en la función respiratoria o en la fuerza muscular.
Los autores opinan que se necesitan más estudios para identificar qué pacientes con EPOC son más propensos a beneficiarse con el asesoramiento nutricional y los consejos sobre la fortificación alimentaria.