El Instituto Nacional de Protección a los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor) suspendió este martes la comercialización de productos de un establecimiento comercial que se dedicaba a vender alimentos y otros artículos quemados y en mal estado, poniendo en riesgo la salud y seguridad de la población.
Se trata del comercio La Feria 505, ubicado en la avenida Duarte, próximo al Mercado Nuevo donde la entidad estatal decomisó más de 8 mil productos entre leche, enlatados, embutidos, detergentes, fórmulas lácteas, cereales, cosméticos, aerosoles, entre otras mercancías en condiciones no aptas para el consumo humano.
Anina Del Castillo, directora de ese organismo, impuso además la multa de 500 salarios mínimos, ascendente a 2.5 millones de pesos como parte de la sanción tipificada en la Ley 358-5 de muy grave, a este establecimiento que comercializaba productos sin calidad, descompuestos, contaminados y en un ambiente que incumplía con los parámetros permitidos de higiene en sus instalaciones.