Nueva York.- La dirección ejecutiva de “Prensa & Comunidad” (Prenco) en esta ciudad, exhortó a la comunidad dominicana a mantenerse vigilante durante los próximos y después de los 90 días dado por el alcalde Bill de Blasio que revisará monumentos y estatuas que representen sentimientos raciales o molesten a grupos de la urbe.
Prenco, integrada por periodistas y líderes comunitarios criollos para defender los intereses de los quisqueyanos en Estados Unidos, sostienen que ante la posible inclusión en la lista “negra” de la estatua de Duarte, el Alcalde debería desistir de cualquier propósito, porque no es cierta la acusación que le hacen “perversos” al patricio de que su objetivo durante el separatismo dominicano tuvo “raíces racistas”.
Ese es el alegato de los “taimados”, enemigos tradicionales de la República Dominicana, porque Duarte es dignidad, moral, ejemplo de libertad y nos liberó del horrible “yugo haitiano”, indica.
La historia de los pueblos la hacen los hombres y mujeres comprometidos con las mejores causas para que la libertad y la justicia social prime sobre cualquier interés particular, y los sectores quisqueyanos en NY, sin importar bandería política, que abracen la dignidad, el coraje y el patriotismo, deben decir presente con la vigilancia.
Si se atenta contra la figura de Duarte, se estaría atentando contra los 900 mil criollos que residimos en la urbe, contra la comunidad quisqueyana que es ejemplo en los aportes del desarrollo, no solo en NYC, sino en todo EEUU.
Atentar contra Duarte sería atentar contra los criollos que han enriquecido la vida política, cívica, económica y cultural de NY como votantes, activistas, funcionarios electos, empresarios, artistas y en los deportes.
«Sería atentar contra una comunidad que representa uno de los grupos de mayor importancia en la actividad comercial, económica y política de esta ciudad; asimismo contra los que aportan alrededor de un 12.3% al Producto Interno Bruto de NYC», subraya.
Se mancillaría el honor de más de 2,000 agentes policiales solo en NYC, cinco mil bodegueros, y veintenas de miles de trabajadores (bodegas, salones de belleza, mecánicos, agencias de viajes), de varios oficiales electos, entre ellos un congresista, legisladores estatales, concejales, funcionarios federales de gabinete, y jueces.
Entre los directivos figuran Ramón Mercedes, presidente; David Williams, Alberto Jiménez y Francis Méndez, vice presidentes; Rafael Borges, secretario general; William Jiménez de Finanzas; Román Polanco y Erasmo Chalas Tejeda de prensa y comunicaciones; Rafael Mendoza de relaciones internacionales; Jairo Guerra y Mildred Simé, entre otros.