Miami.- El presidente estadounidense, Donald Trump, declaró el estado de catástrofe natural en Florida para poder desbloquear fondos y medios federales suplementarios, con el fin de ayudar a los damnificados del huracán Irma en este estado.
“Ahora mismo nuestra principal preocupación son las vidas humanas”, dijo Trump, quien anunció que visitará el estado “muy pronto”.
Las ciudades de Naples, Fort Myers y las pobladas zonas de la bahía de Tampa (al oeste de Florida), enfrentan la amenaza de olas de hasta 4,5 metros, suficientes para provocar serias inundaciones.
Este domingo el huracán Irma descargó en la Florida su furia con violentas ráfagas e inundaciones, donde tres personas ya perdieron la vida.
Los puertos y las marinas de la ciudad costera fueron arrasados por los vientos del huracán Irma.
Tal y como fue pronosticado, Irma impactó este domingo en la mañana en los Cayos (sur) como huracán de categoría 4. Por la tarde volvió a tocar tierra en Marco Island (oeste) como categoría 2.
A pesar de haberse degradado, las autoridades advirtieron que los vientos siguen siendo “peligrosos”. Unos 6,3 millones de personas recibieron la orden de evacuar sus viviendas en todo el estado.
Cerca de dos millones de abonados estaban sin electricidad, según la compañía Florida Power and Light.
Una policía y un oficial penitenciario murieron cuando su vehículo chocó en las inmediaciones de Sarasota (oeste).
Otro hombre se empotró el sábado contra un árbol en Key West, en los Cayos. Además de estas tres muertes, otras 27 personas fallecieron por Irma a su paso por el Caribe.
Un aparente tornado generado por Irma destruyó seis casas rodantes en Palm Bay, a cientos de millas de distancia a lo largo la costa estatal en el Atlántico.
Una inundación fue reportada en la carretera Interestatal 4, que cruza la zona central de Florida.
Las autoridades impusieron toques de queda en Miami, Tampa, Fort Lauderdale y muchas zonas del resto del sur de Florida.