Washington.-Tres de los colaboradores de la campaña del presidente Donald Trump fueron acusados este lunes de manera formal y dos de ellos se declararon no culpables.
Paul Manafort, exjefe de campaña de Trump, se declaró no culpable de todas las acusaciones presentadas en su contra como parte de la investigación del fiscal especial Mueller sobre la presunta intervención rusa en las elecciones de 2016.
Manafort, junto con su exsocio de negocios Rick Gates, compareció la tarde de este lunes en el Tribunal Federal de Distrito de Washington. Gates también se declaró no culpable de todos los cargos en su contra.
La acusación formal contra Manafort y Gates tampoco menciona a Trump o la intervención en las elecciones. Sin embargo, la acusación de 31 páginas contra los dos hombres contiene 12 cargos, incluyendo conspiración para lavar dineros, conspiración contra Estados Unidos, no estar registrados como agentes de intereses extranjeros, declaraciones falsas y engañosas relacionadas con la Ley de Registro de Agentes Extranjeros, declaraciones falsas y siete cargos por no presentar información de cuentas bancarias y financieras.
Por otra parte, George Papadopoulos, ex asesor de política exterior de la campaña presidencial de Trump, se declaró culpable de mentir al FBI y aceptó haber contactado a un profesor con vínculos con Moscú, indicaron hoy fiscales.
Papadopoulos admitió que mintió durante una entrevista con el FBI sostenida en enero sobre sus contactos con un profesor ruso que tiene «importantes conexiones con funcionarios del gobierno ruso», según un informe del New York Times.
Después de que se dio a conocer que fueron acusados tres de sus colaboradores de campaña, Trump publicó esta mañana en Twitter que no hubo «colusión».
«Lo siento, pero esto fue hace años, antes de que Paul Manafort fuera parte de la campaña de Trump. Pero ¿por qué no investigan a la torcida Hillary y a los demócratas?», publicó Trump.
«Además, no hay colusión», anunció el presidente.
Manafort fue acusado de canalizar millones de dólares a través de compañías ficticias en el extranjero y de utilizar el dinero para adquirir autos de lujo, bienes raíces, antigüedades y trajes costosos, según un informe del New York Times.
Las autoridades dijeron que Manafort lavó más de 18 millones de dólares y Gates fue acusado de transferir más de tres millones de dólares desde cuentas en el extranjero. Los dos también fueron acusados de hacer declaraciones falsas.
En mayo se nombró a Mueller, director del FBI jubilado, como fiscal especial a cargo de la investigación sobre la presunta injerencia rusa. Sus fiscales han presentado evidencia ante un gran jurado federal en Washington.