NUEVA YORK — No es fácil ser manager de los Nacionales de Washington por múltiples razones.
Por ejemplo, el equipo conecta cinco jonrones, pero permite que le remonten una ventaja de 11-7 en el octavo inning y termina perdiendo el lunes por 13-11 ante los Filis de Filadelfia. Además, en ese mismo partido, los lanzadores reciben un par de grand slams.
El equipo también tiene el peor porcentaje de fildeo en las Grandes Ligas y ha cometido 19 errores en 18 partidos.
En el ámbito de lo ridículo, sus dos estrellas, Adam Dunn y Ryan Zimmerman, salieron al terreno hace un par de semanas con camisetas en las que no aparecía la letra "o", y el nombre del equipo rezaba "Natinals".
Su gerente general Jim Bowden renunció en plena pretemporada tras verse involucrado en un escándalo por los bonos que se otorgan a prospectos latinoamericanos, más la revelación de que el equipo contrató a un campocorto dominicano por 1,4 millones de dólares que ahora tiene 23 años y no los 19 que se pensó originalmente.
Pero el piloto dominicano Manny Acta mantiene la frente en alto al mando de un plantel cuyo récord de 4-14 es el peor de las mayores.
"Obviamente el récord de ganados y perdidos no era lo que nosotros estábamos anticipando", dijo Acta en una reciente entrevista con The Associated Press. "Nosotros pensamos que hemos jugado mucho mejor de lo que el récord indica. Hemos tenido oportunidades de ganar juegos que en los últimos innings se nos fueron de la mano".
Los Nacionales perdieron 102 juegos el año pasado y al paso que van podrían repetir o incrementar esa cifra.
Esa no es una buena señal para Acta, en su tercera campaña como dirigente del equipo. En Washington muchos ya piden su cabeza.
Tras mudarse de Montreal, los Nacionales tuvieron que empezar casi desde cero y muchas de las movidas de Bowden fueron cuestionables.
Cuando se le preguntó si hay días en los que se desespera ante los constantes tropiezos con los que debe lidiar, Acta ni se inmutó.
"Yo sabía en lo que me estaba metiendo", afirmó. "Desde un principio, a mí no me dijeron que yo iba a ganar la división. A mí lo que se me pidió fue que tuviera paciencia, que desarrollara a los muchachos jóvenes y que, poco a poco, mediante el sistema de finca y la agencia libre, se iba a construir un equipo ganador para hacer un equipo competitivo para 2010".
También se expresa confiado por su continuidad en el puesto, desoyendo los rumores de un posible despido.
"Me he sentido con todo el apoyo de los dueños y los directivos de este club", dijo Acta. "Pero eso está fuera de mi control. Yo lo que puedo controlar es mi actitud, controlar las emociones y poner a estos muchachos en las situaciones en las que ellos puedan tener éxito. Lo otro no me preocupa".
Pese al marasmo actual, Washington tiene algunas piezas que alientan la posibilidad de un mejor futuro.
Con 22 años y una recta de 95 millas por hora, el pitcher Jordan Zimmermann es una de las mejores promesas en la lomita y ha ganado brillantemente sus dos primeras aperturas.
El venezolano Jesús Flores ha sido una revelación detrás del plato. Lograron contratar al jardinero izquierdo Dunn por dos años y 20 millones de dólares, demostrando que pueden competir en la agencia libra, y le renovaron el contrato al tercera base Zimmerman, segundo en la votación del Novato del Año de 2006, por cinco campañas y 45 millones de dólares.
Es por eso que Acta procura mantener espantado cualquier tono negativo en torno al equipo.
"Sólo nosotros sabemos lo que tenemos … Nuestro trabajo es reconstruir a este equipo, convertirlo en un equipo ganador para el futuro. Tenemos una cantidad de jugadores jóvenes que se están desarrollando", sostuvo.