Las mujeres con sobrepeso tienen que esforzarse más en el trabajo por temor a que sus colegas las califiquen como perezosas, según afirma una investigación de un grupo de científicos de los Países Bajos, quienes interrogaron a 22 mujeres trabajadoras, que se identificaron como gordas u obesas, sobre cómo se sentían en el trabajo.
Los científicos de la Universidad de Utrecht notaron que la presión sobre los empleados gordos se ha exacerbado en los últimos años debido a iniciativas de trabajo para promover la salud.
La encuesta, que se publicó en el ‘Scandinavian Journal of Management’, señala que las mujeres tendían a hacer esto ya sea ajustando su apariencia o comportamiento para parecer más profesional y exitosa, cuando en realidad no tenían necesidad de hacerlo.
Este tipo de estereotipos son los que se tienen que desterrar, aseguraron los investigadores, ya que el éxito o profesionalismo no se puede medir solo por la apariencia física, sino por las capacidades de cada individuo.
También destacaron las iniciativas de las empresas para mantener pausas activas con el fin de motivar al ejercicio físico, así como a una alimentación saludable, pero enfocado a temas de salud, y no estético, como encuentra el muestreo.
Así mismo recomiendan a las entidades a mantener asesoramiento sobre nutrición y actividad física, con el fin de precautelar la salud de sus empleados, y por ende, su productividad. (I)