Lean estos nombres: Net Campbell, Michael Lozada, Yuri Romanov y Timothy Bradley.
¿Conocen esos nombres?
Estoy seguro que los fanáticos dominicanos que siguen el boxeo profesional, conocen el nombre de Amet Díaz.
Bien, Amet Díaz es panameño. Y fue el último boxeador a quien enfrentó, el 20 de diciembre de 2008, el púgil dominicano Joan Guzmán.
Guzmán, en una pelea pactada a 12 rounds montada en el Palacio de los Deportes VirgilioTravieso Soto, venció a Díaz por decisión unánime.
Aquella fue una pelea "especialmente preparada" para que Guzmán, ante su público, buscara la reivindicación.
Es decir, para que demostrara la eficiencia de otros años tras no poder disputar, aquel fatídico 13 de septiembre del pasado año en un coliseo de Biloxi, en el estado de Missippi (Estados Unidos), el cinturón mundial del peso ligero.
Recuerden el suceso: Que Guzmán no pudo hacer, en la báscula oficial, las 135 libras -o menos- que certifica la división del peso ligero. Pero además tampoco pudo subir al cuadrilátero para contender, aunque sin corona mundial en juego, con Net Campbell.
Se justificó su no accionar porque, de acuerdo con un informe médico, el ex doble campeón mundial se vio afectado por deshidratación. Estaba muy débil.
Este diario digital ha seguido, a partir del desastre de Biloxi, todo el negativo discurrir de Joan Guzmán.
A pesar de haber ganado, en forma clara, el combate que protagonizó con Amet Díaz, muchos seguidores de boxeo -entre ellos miles de sus admiradores-, Joan Guzmán no ha recuperado su status en el exigente deporte de los puños enguantados.
Lo que se ha tratado, pero…
Después de lograr la victoria ante Amet Díaz, Guzmán y su inepto apoderado José Núñez, han tratado de que "venga el progreso".
Vale señalar que ojalá Guzmán encuentre "el nuevo camino" y regrese a la fama internacional…¡y pueda ser, de nuevo, monarca del mundo!
El 21 de febrero pasado Guzmán, como una forma de ir preparando el nuevo camino", estaba patado para combatir con el mexicano Michael Lozada. Esa pelea formaría parte del cartel en el que el puertorriqueño Miguel Cotto y el británico Michael Jernning iban a protagonizar el entonces título (vacante) de los welters avalado por la Organización Mundial de Boxeo (AMB). Ese combate finalmente no se celebró. Y no se dio ninguna explicación.
Yuri Romanov, un descolorido boxeador de origen ruso, había sido señalado para ir a un combate por el vacante cinturón ligero de la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
Ya todo estaba "debidamente preparado" para que el dominicano enfrentara a Romanov y tuviera la oportunidad de conquistar una tercera faja del mundo. ¡Aquella pelea también se cayó!
El más reciente fracaso que afectó a Joan Guzmán ocurrió hace dos semanas. Porque el señor José Núñez había llegado a un acuerdo económico con el manager de Timothy Bradley para que el pugilista quisqueyano fuera a una pelea por el campeonato mundial del peso welter junior (140 libras) versión Organización Mundial de Boxeo (OMB).
E incluso Guzmán se había sometido a un intenso programa de entrenamiento en un gimnasio de la ciudad de Los Angeles.
Pero nuevamente a Guzmán le llegó la negativa noticia de que "esa pelea titular no podía ser".
Por una sencilla razón: Joan Guzmán no figura clasificado entre los 15 mejores welters juniors de la OMB. El presidente de ese organismo, Francisco "Paquito" Valcácer, no autorizó la pelea.
Así, estimados lectores, está el "rosario" de problemas de Joan Guzmán, quien -como lo reseñé la semana pasada en una crónica publicada en DominicanosHoy.com- sigue con "el santo en la espalda".
Mientras tanto, el óxido continúa "bañando" el cuerpo de Joan Guzmán. Sigue inactivo y con no buenas perspectivas.
¡Es la gran verdad!
E-mail: carlosninagomez@yahoo.com