Violencia de género, feminicidios íntimos y no íntimos y la violencia domestica, son algunos de los seudónimos con que se define un mal que cada día escala más peldaños en la sociedad dominicana. Nos referimos al abuso psicológico, verbal y físico que atraviesan cientos de mujeres de diferentes ámbitos y clase sociales.
Este fenómeno en épocas recientes ha ocupado una parte importante en los medios de comunicación. Sin embargo, contrasta el hecho de que se hace referencia a un fenómeno cuya existencia se remonta a los propios orígenes de la sociedad, mientras su reconocimiento como problema social y de salud data de épocas muy recientes.
La violencia hacia y en contra de las mujeres, alcanza cifras alarmantes, aunque a veces ésta se encubre bajo el manto del término “violencia doméstica”. Pero este termino involucraría a ambos géneros, entonces si es domestica ¿por qué las estadísticas arrojadas por la Fiscalía del Distrito Nacional, registran cientos de casos de mujeres, contra un mínimo o casi nulo de casos contra hombres?
Si analizamos las estadísticas, solo en el Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo, en el año pasado hubo 27 mujeres muertas a manos de sus compañeros sentimentales, al igual que unos 11 casos entre los meses de enero y abrir de este año.
Para el año 2008, las estadísticas registraron en el Distrito Nacional unos 12 casos. Este año sólo se producido un caso de muerte.
Un equipo deDominicanosHoy.Com, se trasladó hasta la Unidad de Atención y Prevención de la Violencia de Género, y conversó con la Procuradora Fiscal Ana Andrea Villa Camacho.
En un conversatorio sostenido con la Procuradora Villa Camacho, confesó, que la mayoría de casos de mujeres muertas a manos de hombres, es en situación de intimidación de algunas de las partes. Razón por la cual a estos se les denomina “feminicidios íntimos”.
Villa dijo que diariamente al centro acuden entre 10 y 13 víctimas en busca de algún tipo de ayuda. Esta unidad funciona hace unos tres años, se reciben denuncias de violencia física, verbal, psicológica, matrimonial, entre otras; este cuenta con un personal, una estructura y un procedimiento científico para trabajar y atender la problemática.
Como se determina que hay violencia
El perfil de una mujer maltratada, según la Procuradora es el de una persona triste, con síntomas de depresión, poco tolerancia. “La mujer maltratada no es masoquista como se dice, son mujeres que viven dentro de un círculo vicioso que inicia con maltratos verbales, explosiones de ira y maltratos físicos, luego de estos el agresor regresa una y otra vez con un supuesto arrepentimiento”.
Esta fase de arrepentimiento, no es más que una manipulación con la cual el agresor hace que la victima termine por sentirse culpable. “Si yo no le hubiese llamado a la novia”, “si no le paliara”, el me trata así, porque me quiere”, justificaciones como estas buscan la agredida para explicar el agravio.
“El primer paso para superar estas mala vivencias es hablarlo, luego denunciarlo. Con la ayuda de las autoridades correspondiente y con apoyo legal y psicológico que prestan las fiscalías e instituciones especializadas. Las victimas pueden lograr salir de ese círculo vicioso”.
Puedo decir,”que la mujer dominicana está despertando, está aprendiendo alzar la voz, para denunciar el mounstro silencioso que las carcome. Años tras años el número de denuncias aumenta. Solo entre las quinces Fiscalías Barriales del Distrito se han registrados cientos de denuncias, en el período enero-marzo del corriente año se han registrado unas 3,192 denuncias prestadas de violencia contra la mujer”. Sostuvo
Estas se dividen entre un 21 por ciento, por amenazas, 35 por ciento violencias físicas, 7 por ciento violencia patrimonial, 36 por ciento violencia psicológica y verbal, los cuales han conducido a que se disponga unas 2,762 órdenes de protección, 238 arrestos practicados, 503 conducencias, 21 autos de apertura a juicios y 10 sentencias condenatorias, entre otras.
La procuradora manifestó que tanto el factor económico como emocional influyen a que cientos de mujeres se conviertan en víctimas, estas se someten amenaza del conyugue el cual las sugestiona diciéndole, que si lo denuncian las matan, les quitan a sus hijos o le quitan la manutención de estos. Razón por la cual caen en el “síndrome de doble ciego” o “Estocolmo” (donde se identifica con su agresor).
Existen leyes que penalizan estos hechos como la ley 24-97 de violencia intrafamiliar. El informe de Derechos Humanos recuerda que la penalización de estos crímenes, en República Dominicana oscila entre uno y 30 años de prisión, con multas que van desde los 700 a 245,000 pesos.
Es cierto que tanto el Ministerio Publico, como entidades gubernamentales y ONG han iniciado fuertes campañas de concientización y precaución para que cese la violencia de género, pero no es suficiente, tanto los medios de comunicación, como las iglesias y la sociedad en general deben alzar su voz, para condenar radical mente este mal.
Las victimas siguen abatiéndose, los feminicidios siguen a la orden del día, el pueblo sigue llorando perdida de mujer, madre, amigas y esposas, valiosas. Sólo una persona puede poner un alto a la violencia y esa es la misma víctima.
Como dice la señora Villa Camacho “El amor no duele y quien ama no lastima, valora” recuerda que tienes en tus manos la decisión de vivir sin violencia, no seas una estadística en el gran número de mujeres víctima de violencia.
