Nueva York.- Una dieta infantil rica en calcio disminuiría el riesgo de muerte por accidente cerebrovascular (ACV) en la edad adulta, mientras que la alimentación en la niñez rica en lácteos o calcio reduciría a futuro el riesgo de morir por cualquier causa.
Estos son los resultados obtenidos por un estudio publicado en la revista Heart.
"La costumbre de darles leche extra a los alumnos para mejorar el desarrollo era muy frecuente en Europa en el siglo XX y el consumo infantil de leche se sigue promoviendo en muchos países del mundo", señaló el equipo de Jolieke C. van der Pols, del Instituto de Investigación Médica de Queensland, en Brisbane, Australia.
"Aun así, existe preocupación sobre los posibles efectos a largo plazo del consumo de los productos lácteos asociados con el riesgo de cáncer y enfermedad cardiovascular; se están discutiendo los niveles de seguridad de consumo", escribieron los autores.
El equipo dirigido por Van der Pols realizó un seguimiento durante 65 años de un estudio británico sobre el consumo alimentario familiar entre 1937 y 1939. Allí se determinaron las causas de muerte entre 1948 y el 2005 en 4.374 participantes del estudio.
Al final del período de seguimiento, 1.468 de los 4.374 participantes (el 34 por ciento) habían muerto, incluidos 378 por enfermedad cardíaca y 121 por ACV.
Según el equipo, una dieta rica en calcio en la niñez estuvo asociada con un menor riesgo de morir por ACV.
En especial, los autores observaron que el consumo de unos 400 miligramos de calcio por día estuvo asociado con entre un 40 y un 60 por ciento menos riesgo de morir por ACV con respecto a los niveles de consumo por debajo de ese nivel.
No se observaron evidencias sólidas de que el consumo alto de lácteos en la niñez esté asociado con la mortalidad por enfermedad cardíaca o ACV.
Sin embargo, los niños del grupo que más calcio y lácteos (leche, en especial) habían consumido tuvieron tasas más bajas de mortalidad que los del grupo con ingesta más baja.
"Hasta ahora, este es el primer estudio que proporciona evidencia de la relación entre el consumo infantil de lácteos y calcio y la mortalidad en edad adulta por ACV y todas las causas", finalizó el equipo.
Los autores opinan que se necesitan más investigaciones para replicar estos resultados; "en especial, estudios con una evaluación más completa a lo largo de la vida de los efectos del consumo de lácteos y los trastornos cardiovasculares".