El cambio de mando en la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) será a las 3:00 de la tarde de este lunes, y es cuando el administrador general saliente, ingeniero Radhamés Segura, fijará posición sobre su destitución.
Se supo extraoficialmente que unos 30 funcionarios de la institución tienen sus cartas de renuncia preparadas, en apoyo a Radhamés Segura. El administrador saliente y el entrante, Celso Marranzini, estuvieron reunidos esta mañana.
Tras el encuentro, Segura abandonó la CDEEE faltando 20 minutos para las 12:00 del mediodía y Marranzini lo hizo más temprano. Mientras que es notorio el nerviosismo que reina entre los empleados, que esta mañana se desplazaban herméticos por los pasillos de la institución.
Asimismo, desde las 6:00 de la mañana Segura se reunió con sus colaboradores en medio del rumor de que no aceptará el cargo de asesor del Poder Ejecutivo en materia energética, dado por el presidente Leonel Fernández.
Sectores dentro del partido de gobierno podrían “arruinar” la gestión de Marranzini, debido a que no aprueban que el empresario sustituya a Segura en la CDEEE, por haberse sido el principal crítico del dirigente peledeísta.
La primera señal del descontento que se generaría en el PLD por la destitución de un miembro del Comité Político, para en su lugar nombrar a un empresario, sería la posible renuncia de 30 directores y subsecretarios de la CDEEE.
Marranzini venía “lanzando petardos” a la gestión de Segura, llegando, incluso, advertirle que el sector privado no se suicida, como respuesta a las acusaciones del ahora asesor del Poder Ejecutivo de que las plantas de carbón no son una realidad “porque los empresarios no han cumplido con lo pactado”.
Para entonces, Marranzini expresó que el sector privado se diferenciaba del gobierno en el sentido de que el Estado podía” botar” US$4 millones en subsidios y los empresarios no, tras señalar que “con la indefinición e incertidumbre en el sector eléctrico, nadie se atreve a invertir”.
Este domingo 16 de agosto, mediante el decreto 599-09, el presidente Fernández destituyó a Segura como vicepresidente de la CDEEE y en su lugar nombro a su principal crítico, Celso Marranzini.
Con el mismo decreto, Segura pasó a ser asesor del Poder Ejecutivo en materia energética, con rango de secretario de Estado.
Segura había entrado en “desgracia” a raíz de unos reportajes realizados por la periodista Nuria Piera que denunciaba la práctica de nepotismo (nombramiento de familiares) así como un listado de asesores que cobraban sueldos de lujos en la CDEEE.
Las denuncias de la periodista Piera provocó que unas 30 organizaciones de la sociedad civil publicaran un comunicado, pidiendo al presidente Fernández sanciones drásticas contra los funcionarios que estarían cometiendo actos de corrupción y nepotismo en la administración pública.
Segura había venido justificando los nombramientos de familiares, alegando que no eran parientes directos, y que no violaba ninguna ley, “los sueldos altos de los asesores se criticaban porque son dominicanos, pero si fueran extranjeros no lo harían”.