Reproduzco el siguiente artículo porque hace dos meses que hice esta advertencia y tal como lo dije ha sucedido. Fui objeto de un atentado, de amenaza de muerte, de agresión en mi propia residencia, ante mis niños pequeños y mi esposa, por el regidor del PRD en el Ayuntamiento de Santiago, Marino Brito Pimentel.
A las 7:30 de la mañana del martes 2 de septiembre, el regidor Marino Brito, acompañado de dos individuos fuertemente armados, penetró a mi residencia, insultándome y advirtiéndome de que “te voy a matar aunque yo no llegue a Diputado, te doy de plazo hasta el viernes para que te retractes del artículo que escribiste en mi contra”. Me empujó, me rodeó con los hombres armados.
Se me abalanzó encima y se llevó mi celular, porque a su decir yo estaba grabando las amenazas que me hacía.
Se refería al artículo “El PRD y el Ayuntamiento de Santiago”, publicado en varios medios, donde entre otras cosas decía: “como elegir a un vocero de regidores del PRD atado de pie y mano al Síndico José Enrique Sued, que le regaló el Distrito municipal de Hato del Yaque, dentro de las componendas y compromisos de apoyo al ejecutivo municipal. Compromisos que se hicieron fuera de las directrices del partido Blanco.”
Ya está puesta la denuncia y la querella en la fiscalía de Santiago. Espero que la justicia actúe correctamente. Porque tal y como dice el Colegio Dominicano de Periodistas y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa en Santiago “es que el simple hecho de que el regidor Marino Brito se presentara a la residencia del comunicado en horas de la mañana y vociferara improperios y amenazara con privar de su vida a Fernando Peña es suficiente razón para que sea sometido a la justicia.”
A continuación, el artículo donde hice la advertencia.
“Por temperamento, formación y convicción soy de los que entienden que ningún síndico, presidente o cualquier detentados del Poder está para hablar y mandar al gobernado para callar y obedecer.
“La clase política, los que detentan el Poder de los municipios y del gobierno central deberían ser los más interesados en tener una prensa crítica, vigilante de sus ejecutorias y del manejo transparente de los recursos del erario público”.
Mis críticas al manejo inadecuado del gobierno municipal, de la poca o ninguna transparencia que implementa el señor síndico José Enrique Sued, en el manejo de los miles de millones de pesos del cabildo santiagués, no tiene otro interés que contribuir al adecentamiento honesto, transparente de las ejecutorias municipales.
Sólo he escrito sobre la realidad que se está viviendo en el Ayuntamiento de Santiago, avalado por documentos, testimonios de regidores, funcionarios y empleados del cabildo.
Que la generalidad de comunicadores no lo haga, no es mi problema. Yo cumplo con mi deber de periodista y ciudadano.
Yo, señor síndico, no puedo hacer mutis ante la falta de transparencia en el manejo de los recursos municipales, ante la falta de informe del ejecutivo municipal del destino, de lo planificado, de más de mil millones de pesos recibidos por el Ayuntamiento.
¿Cómo callar si mientras los moradores de los barrios de Santiago protestan por la falta de un transformador, el arreglo de las calles, la falta de agua potable, la higienización de su sector, etc., y vemos que algunos regidores reciben contratas millonarias, así como un llamado “barrilito”, y usted se gasta la frívola suma de 45 y 35 millones de pesos en arreglo de un parque?
Sabedor de que usted, señor síndico, cuenta con espalderos matones y de que la intolerancia la ha hecho práctica en la administración del Ayuntamiento local, haciendo lo que le da la gana, sin oír a nadie y violentando su legalidad, hago la siguiente advertencia:
Debido a que usted en la sesión celebrada el martes 14 de julio presentó el artículo, “Regidores y Ayuntamiento de Santiago” publicado en varios periódicos digitales y en mi columna del periodismo La Información , y lo hizo conminando a los regidores a leerlo y tomar acciones, debo alertar de la peligrosidad de su acción.
Con ello se induce a la provocación en mi contra.
Yo soy un periodista que toda la vida he tenido carnet de militante, que defiendo con pasión mis ideas, ahí están plasmadas en cientos de programas de tv, cientos de artículos de opinión y en algunos libros escritos, pero nunca lo he usado para la denostación y la calumnia.
Recuerde señor síndico que es la libertad de expresión el mejor instrumento para los partidos y líderes políticos presenten sus propuestas creativa y realista a la sociedad que pierde la esperanza por acciones como la denunciada.
Es la libertad de expresión que debería enarbolarse para levantar el ánimo social que lucha por abrirse espacio de sobreviviente frente a la corrupción, el hambre, la falta de transparencia que domina nuestra sociedad y al mundo.
La gente sólo quiere que se le resuelvan sus problemas, de cómo salir adelante, que se le simplifique la vida, no que se le complique la existencia.
De mi parte, señor síndico, sólo busco contribuir a elevar el nivel del debate y ennoblecer el quehacer político, porque la política es el arte de hacer el bien y de hacerlo bien y no lo que nuestra sociedad, harta de palabrería y ofensas políticas, percibe.
Finalmente, desde este generoso espacio que también me permite expresarme libremente me dirijo a mis pocos lectores para que pidan y reclamen a los políticos transparencia, que cuando busquen su voto sean auténticos, pero que no conviertan deseo de servicio en una yerta de alcahuetes. Que sigamos abriendo el espacio a la verdad que no está peleada con el respeto para decirla.
Valga, pues, la advertencia.
La responsabilidad de lo que me pase a mí y mi familia, tiene nombres y apellidos.
El autor es periodista
Frontera25_@hotmail.com