El jefe de la Policía Nacional , Mayor General Rafael Guillermo Guzmán Fermín, desarrolla un combate sin tregua contra el crimen organizado, la violencia, los atracos, los robos y su base de sustentación, el microtráfico ha planteado tres salidas para los que se dedican al negocio de las drogas: abandonan el negocio, salen del país o van para la cárcel.
En menos de un mes, la Policía Nacional, la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), las Fuerzas Armadas y el ministerio público han golpeado contundentemente las redes nacionales e internacionales que tienen el territorio nacional como un centro de operaciones para el bombardeo mar, aire, tierra y transporte de cargamentos hacia Puerto Rico, Estados Unidos y Europa.
La policía Nacional por medio de la Dirección Nacional de Lucha Contra el Microtráfico decomisó 293 kilos de cocaína e incautó una fuerte suma de dólares.
Entre tanto, la DNCD golpeó donde le duele a los narcotraficantes incautando 4.6 millones de dólares, propiedades en apartamentos, carros de lujos, prendas y otros valores.
Estas acciones hablan muy bien de la labor conjunta que se viene ejecutando en los barrios, las torres de lujos, y en las provincias.
Ciertamente, estamos en el frente de combate haciéndole saber que como advirtiera en un mensaje en la Asamblea Nacional, el presidente de la República, doctor Leonel Fernández Reyna, que el narcotráfico no pasará.
Y no pasará en la medida que se haga cumplir con transparencia, firmeza y coraje la ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas que requiere de una reforma para fortalecer su alcance y aplicación.
Existe un laberinto de interpretaciones antojadizas de la ley 50- 88 a raíz de la implementación del Código Procesal Dominicano, que permite a los traficantes obtener medidas de cohesión de fianzas, ir a sus casas y en ocasiones libertades administrativas por parte de los fiscales y los jueces de aplicación de las penas, acogiéndose a normas legales o falta de prueba, a pesar de la DNCD incautar las drogas y enviar las evidencias.
El Código Procesal Penal Dominicano, en cuanto a la ley de drogas se ha colocado por encima de la de lo que manda y establece en el sentido de que en los delitos de drogas no hay fianzas, indulto ni mucho menos libertad, sino cumplimiento de las sentencias.
Este código es uno de los peores obstáculos que tiene la lucha contra el narcotráfico y el microtráfico.
Desde que se puso en vigencia la ley 50-88, solamente se ha dictado una sentencia con confiscación de bienes consistente un carro marca Honda color oro, que no se si está en el deposito de bienes incautados. Debido a eso fincas, apartamentos, yates, aviones, torres, jeepetas, carros de lujos cuantiosos bienes no se saben donde están, si fueron devueltos o quienes los tienen. Basta pasar revista al caso del ex capitán del Ejercito Nacional, Quirino Ernesto Paulino Castillo, que tenía una finca moderna donde las vacas se ordeñaban con música, y nadie sabe de estas vacas.
Son cosas a ser tomadas en cuenta para definir una política coherente, de estado y de alta política contra el narcotráfico, que no es un asunto de discursos ni de fuego, sino de decisión, coraje y patriotismo.
La ciudadanía debe unirse a los esfuerzos que realizan el jefe de la Policía Nacional , Mayor General Guzmán Fermín, el presidente de la DNCD Mayor General Rolando Rosado Mateo, el Ministerio Público y las Fuerzas Armadas. Tenemos que hacer un frente nacional de lucha contra el narcotráfico, el micro, el lavado de dinero y el crimen organizado.
Los capos barriales, sus cabecillas, se están acogiendo a irse del país. Por lo menos algunos, del barrio Capotillo, trasfirieron sus bienes a familiares y amigos viajando a las islas adyacentes a la República Dominicana, Martinico, San Thomas, Curazao, Aruba y Venezuela.
Los que permanecen en el país se mueven sigilosamente aprovechando las facilidades que tienen por viejas conexiones internas que tienen por las grandes sumas que gastan en el pago de peajes.
Cada día el cerco se le estrecha a los narcotraficantes, que justamente tienen tres salidas: abandonan el negocio, salen de país o van a las cárceles.
Ya lo saben, elijan uno de estos caminos y rápido porque el ojo mágico de las autoridades los observa, vigila, persigue, apresa y somete a la justicia a los delinquen en criminal negocio de las drogas.
Felicitamos al jefe de la policía, Mayor General Guzmán Fermín, el Mayor General Rosado Mateo, las Fuerzas Armadas y el Ministerio Público.