Ginebra.- Este año cuatro millones de niñas morirán por enfermedades que pueden prevenirse y 2,5 millones de ancianas se quedarán ciegas por causas evitables debido a las dificultades que las mujeres tienen para obtener asistencia sanitaria, según la OMS.
Bajo el título de la "Las Mujeres y la Salud", la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado hoy un informe que revela esas necesidades sanitarias femeninas
El informe, el primero que se elabora con una perspectiva general desde el nacimiento a la muerte de la mujer, muestra que las desigualdades entre hombres y mujeres son tan amplias, que las ventajas biológicas y de comportamiento preexistentes en las féminas no son suficientes para tener una vida más sana y prolongada, como debería esperarse.
Según la investigación, incluso en el caso de que el trastorno sea el mismo que el de los hombres, las mujeres tienen más dificultades para curarse a causa de las desigualdades en materia de educación, ingresos y empleo.
"El principal obstáculo para la salud de las mujeres no es médico, sino social y político, al carecer las féminas de un buen acceso al sistema sanitario. La pobreza es el principal determinante", señaló la directora general de la OMS, Margaret Chan, quien agregó:
"El problema principal es que en muchos países las mujeres son ciudadanos de segunda clase".
La OMS estima que este año medio millón de mujeres morirá de sida, otro medio millón de tuberculosis, y otras 500.000 por causas derivadas del embarazo y el parto, todas ellas dolencias relacionadas con la sexualidad.
A nivel mundial, la causa principal de muerte de las mujeres en edad reproductiva es el sida.
Por su parte, la mortalidad materna es la principal causa de muerte de las mujeres de entre 15 y 19 años, y es la que más separa países ricos y pobres, dado que el 90 por ciento de los casos se dan en países en desarrollo.
"Las niñas y las mujeres son particularmente vulnerables a la infección por el VIH debido a una combinación de factores biológicos y desigualdades de género, sobre todo en las culturas que limitan el conocimiento sobre el virus, y su capacidad de protegerse y de negociar relaciones sexuales sin riesgo", reza el texto.
Precisamente, las relaciones sexuales forzadas y las violencia sexual es otro de los principales factores de riesgo para la salud de las mujeres.
"La violencia contra las mujeres es un hecho que ocurre en todo el mundo y que tiene serias implicaciones sanitarias", señala el informe.
"Cada año 73 millones de mujeres padecen una depresión profunda, muchas veces relacionada con la violencia a la que son sometidas, psicológica, física y sexual", agregó Chan.
Según un estudio de la OMS, entre el 15 y el 71 por ciento de las mujeres han sufrido abusos físicos o violencia sexual por parte de sus maridos o compañeros masculinos.
Otra de las formas de violencia contra las féminas y que puede acarrear la muerte inmediata, o transtornos físicos y psicológicos para toda la vida es la mutilación genital femenina, o ablación del clítoris.
Se estima que 92,5 millones de niñas en África sufrieron ablación del clítoris, un fenómeno que no cesa, más bien al contrario, y que además cada vez se practica a una edad más temprana.
Toda esta violencia ejercida contra las féminas genera que el suicidio sea una de las causas principales de muerte en las mujeres entre los 20 y los 59 años de edad.
Finalmente, el informe muestra las contradicciones de que "los sistemas de salud desatiendan las necesidades de las mujeres a pesar de que éstas contribuyen mucho a mejorar la salud de la sociedad mediante su función como cuidadoras principales de la familia, y que, además, las féminas constituyan la columna vertebral del sistema sanitario, pero raras veces estén representadas en los puestos de gestión".